El gobierno de Cambiemos trata de mejorar una imagen que ya se encuentra demasiado perjudicada por las políticas contra las grandes mayorías que ha puesto a miles de personas en la calle y ha logrado subir la pobreza a índices históricos, pese a que las promesas anunciaban un iluso camino de pobreza cero en pocos meses de gestión. Según la consultora Inteligencia Analítica, en provincia de Buenos Aires Macri mide 23,7% (32,9% en 2015); Entre Ríos 29,9% (37,8%); Santa Fe 26,8% (35,3%); Córdoba 34,9% (53,2%) y Mendoza 24% (40,8%). Y esos son datos difundidos por Clarín, no por medio kirchnerista alguno. Como lo propone Florencia Saintout en La Plata y otros dirigentes en distintos municipios de la provincia de Buenos Aires, el único camino hacia una adopción real de transformación es lograr una unidad alternativa al macrismo que pueda en las próximas elecciones alcanzar una victoria que deposite el esfuerzo de cada trabajador y lo transforme en una mejor calidad de vida, en nuevos ingresos y en una economía que se motorice internamente, sin complicidades internacionales que jamás llegaron pese a las promesas de los funcionarios de Cambiemos.
Por Carlos López / La gobernadora María Eugenia Vidal tuvo que torcer el brazo contra los docentes gracias a la lucha unida de los gremios que se mantuvieron firmes en una misma línea de acción durante los últimos 16 meses. Ahora, los médicos esta semana realizarán un paro de 48 horas durante el miércoles y jueves para exigir la apertura de paritarias para el sector y respuestas oficiales sobre las deficiencias en infraestructura que sufren en distintas instituciones y la falta de insumos y recursos humanos en diversas dependencias de localidades bonaerenses donde los profesionales no logran atender todas las demandas. En La Plata, el acceso al trabajo sigue siendo un bien preciado mientras que el intendente Julio Garro apuesta a pintar las plazas céntricas y deja en el olvido las políticas sociales pese a los reiterados reclamos de organizaciones políticas y sociales que marchan cada semana por las calles de la ciudad de las diagonales. La presidenta del bloque Unidad Ciudadana FPV – PJ en la Cámara de Diputados de la provincia, Florencia Saintout, quien se encamina a su precandidatura a intendenta por el espacio kirchnerista para las próximas elecciones, cargó contra el jefe comunal macrista por la falta de oportunidades y la crítica situación salarial que atraviesan los cooperativistas del municipio.
La propuesta salarial que aceptaron los gremios docentes el martes pasado fue una derrota política que la gobernadora tuvo que disimular ante las cámaras de televisión con gestos de alegría sobre el cierre de la paritaria. Lo que Vidal no asumirá es que en realidad su gobierno tardó más de un año en llegar a este acuerdo, al cual pese a resistirse tuvo que aceptar por el contexto preocupante a nivel social que genera la inflación y el alto costo de vida que afrontan los bonaerenses. Según lo propuesto por Cambiemos, la intención era no ceder los 4 puntos porcentuales que los gremios le reclamaban a Vidal y avanzar con descuentos contra aquellos docentes que habían adherido a los paros y movilizaciones. Sin embargo, y pese a que la gobernadora resaltó el “compromiso” de su equipo, el acuerdo fue solo posible gracias a la incansable lucha que mantuvieron los maestros para llegar a un salario que al menos permita mantenerlos más cercanos a lograr una mejor calidad de vida sin una gran pérdida del poder adquisitivo con el paso de los meses.
Las felicitaciones públicas de Vidal a sus funcionarios causaron rechazo en los gremios, ya que ellos mismos fueron los que pusieron trabas durante todo el 2018 para no lograr un acuerdo salarial justo y son también quienes se vienen oponiendo a destinar más fondos para los mantenimientos de las instituciones educativas que presentan grandes dificultades edilicias, poniendo en riesgo la vida de chicos y profesionales. Ahora Vidal no sólo no podrá descontar los días de paro, sino que además fue advertida por Suteba sobre las irregularidades que se presentaron la semana pasada con 600 docentes que recibieron incorrectamente sus salarios, en plena negociación. En materia salarial, el aumento confirmado comprende un 15,6% en concepto de la pérdida adquisitiva durante el año pasado que se pagará en un 5% en marzo y un 10,6% durante julio próximo, y una revisión trimestral con cláusula gatillo para 2019, en función de la inflación oficial que informará el INDEC cada mes.
El aumento sostenido de los precios en la canasta básica es algo que afecta a los bonaerenses en su conjunto. Las recientes medidas de Mauricio Macri no hacen más que alargar la agonía de un mercado totalmente descontrolado y sin rumbo, con comercios que cierran sus puertas porque las ventas caen cada mes y con trabajadores que se quedan en la calle por falta de puestos laborales. Congelar los precios o fijar un tope en la cotización del dólar no garantiza que la producción ni la consecuente calidad de vida de los bonaerenses vaya a mejorar durante los próximos meses de cierre de la gestión macrista y se corresponde al tipo de medida económica y política a la que el propio gobierno había asegurado que nunca optaría.
A nivel nacional el macrismo no le encontró nunca una salida a uno de los problemas que prometió resolver. La inflación oficial de marzo alcanzó el 4,7%, lo que arroja un acumuado de 54,7% en el último año. Entre los principales bienes y servicios que pegaron un salto en los primeros meses de 2019 se encuentra el rubro de lo relacionado a la educación, las prendas de vestir y el calzado en general, y los alimentos y las bebidas, dos insumos que se han mantenido con subas constantes durante toda la gestión macrista. El gobierno proyectó una meta presupuestaria nacional para lograr un IPC anual del 23% durante este año, algo que será largamente superado si se toma en cuenta que en los primeros tres meses del año ese indicador ya registra una variación del 11,8%. Además, el polémico congelamiento de precios sobre los productos de la canasta básica que realizó Macri conforma una nueva política del engaño con productos que se cubrirán con segundas y terceras marcas, y solo con una pequeña porción de alimentos saludables y el resto con una importante cuota de tenor graso.
Según el último informe de marzo realizado por la Fundación Soberanía Sanitaria titulado “FSS Informe 40 – La leche que no es”, con las medidas del gobierno “se profundiza el deterioro de la seguridad alimentaria argentina”, ya que debido a la crisis económica “ha bajado el consumo de leche” y “los supermercados han restringido la posibilidad de compra de las leches más económicas y aparecieron en las góndolas alimentos a base de leche de peor calidad nutricional”. El Programa Precios Cuidados que supo lograr un alto rendimiento con el kirchnerismo ahora se convirtió en un rejunte de alimentos que intentan suplir la incapacidad de la mayoría de las personas de completar la canasta básica, pero que lejos de lograrlo pone en peligro la salud de millones de niños y niñas. En la Argentina de Macri según el estudio mencionado “existen 1,7 millones de personas subalimentadas, mientras que 3,8 millones de personas padecen inseguridad alimentaria grave”.
Pedir que la canasta básica se proteja con precios populares y con la inclusión de productos que sean saludables es utópico para un gobierno que ni siquiera le importa el bienestar de los ciudadanos en materia de salud. El sistema de Salud de la provincia de Buenos Aires es hoy una de las áreas más desbordadas por la falta de fondos para compra de insumos y la falta de profesionales en las salas de pronta atención, hospitales y centros de salud que dependen de la gestión de María Eugenia Vidal. La Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia (CICOP) esta semana realizará una medida de fuerza durante el miércoles 24 y jueves 25 de abril con un paro de 48 horas que intenta poner en atención a una gobernadora que niega los reclamos y manda a los profesionales a trabajar en condiciones riesgosas, con sobreturnos y sin insumos, exactamente de la misma manera que lo hizo durante el año pasado con ellos, docentes y otros puestos como los que cubren los trabajadores estatales.
Los médicos, pasados casi cuatro meses de este año, todavía no han sido llamados a paritarias, lo que no hace más que agravar una situación completa de desidia con deficiencias en infraestructura, falta de recursos materiales y de recursos humanos en aumento. Establecimientos de diferentes localidades bonaerenses están acostumbrados a padecer caídas de techo, cortes de luz e incendios por la falta de asistencia estatal que sufren. Esta situación no es casual, sino que responde a una política de ajuste de Vidal en Salud que quedó demostrada cuando en el presupuesto para este año fue emitido en noviembre del año pasado con tan sólo un 5,3% del mismo para destinarse al mantenimiento de hospitales y centros de salud.
Es así como Cambiemos lleva a la mayoría de la población a un camino sin salida. La alimentación de los niños empeora porque las familias protegen los ingresos que alcanzan para menos gastos que antes. Como consecuencia esto extendido en el tiempo genera nuevas problemáticas de salud ante un sistema que no puede cubrir ni siquiera las demandas actuales, las cuales se profundizan a medida que el poder adquisitivo decae, principalmente en los barrios más desprotegidos. La falta de oportunidades laborales es junto con el aumento de los precios en los alimentos una de las problemáticas más olvidadas por Cambiemos durante toda la gestión. Conseguir trabajo es por demás complejo por la alta competencia que establece un mercado en pausa y aquellos trabajadores que lograron mantener sus puestos viven pendientes de posibles cierres, despidos masivos u otras medidas empresariales que los dejen en la calle.
La presidenta del bloque Unidad Ciudadana FPV-PJ en la Cámara de Diputados de la provincia, Florencia Saintout, como precandidata a intendenta de La Plata propone una ciudad alternativa al modelo que hoy conduce el macrista Julio Garro, en una ciudad que en poco más de tres años pasó de ser el motor de la provincia de Buenos Aires a convertirse en la segunda ciudad con más cantidad de pobres del país. “En La Plata hay un gobierno que lo único que hace es pintar las plazas del centro o hacer campaña con las luces led de algunas de las calles y mientras el municipio no tiene el personal mínimo y básico en las salas de asistencia de la salud, no tiene un transporte que funcione correctamente y con el agravante de la falta de trabajo”, afirmó la legisladora el viernes pasado al participar en un debate en el canal de televisión C5N.
Precisamente la semana pasada se registró en la capital bonaerense una de las movilizaciones más emblemáticas contra Garro con seis cortes simultáneos organizados por organizaciones sociales en los accesos a la ciudad para reclamarle al intendente respuestas sobre las subas en la cantidad de personas que ingresaron a la pobreza en los últimos meses. Al igual que desde que Cambiemos llegó al poder los reclamos se mantienen activos por parte de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Barrios de Pie, CTD Aníbal Verón, Frente Popular Darío Santillán CN, ASOMA/FNC, Izquierda Latinoamericana Socialista, Igualdad Social, Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), ADDHES y el Frente Territorial SURGE.
Uno de los principales puntos pedidos por estos colectivos es que sean reincorporados cientos de trabajadores que prestaban servicios en cooperativas del municipio y hoy se encuentran sin trabajo por decisión del intendente. A su vez, los trabajadores que lograron seguir perteneciendo a servicios públicos como la limpieza de las calles se encuentra cobrando un máximo de 6 mil pesos, cuando la canasta básica oficial se ubica por encima de los 27 mil pesos y en una ciudad donde se conoce que el 15,8% de los trabajadores activos se encuentra en la búsqueda de un segundo puesto de trabajo para generar mayores ingresos.
Saintout cuestionó que “todo esto pasa en una ciudad que tiene todo como para no pasar por esta situación”, y explicó que La Plata “es la ciudad con mayor presupuesto en proporción de toda la provincia de Buenos Aires; es una ciudad con un polo productivo muy importante con el cordón frutihortícola más importante de la provincia, tiene una de las universidades más grandes del país para poder articular y generar trabajo”, remarcó.
Uno de los representantes del Movimiento Justicia y Libertad, Emiliano Marcioni, tras una nueva semana de reclamos frente a la Municipalidad le resaltó al portal Diario Contexto que las organizaciones se seguirán movilizando porque “le estamos planteando una serie de puntos al intendente Garro que tienen que ver con el bestial aumento de la pobreza y la desocupación en la ciudad, que impacta directamente en la situación de cooperativas municipales con sueldos bajos, más la falta de obras en los barrios de la ciudad y con una situación que se está recrudeciendo en los comedores barriales a partir de que se duplicó la cantidad de familias que llegan a pedir alimentos porque no llegan a fin de mes”.
El lanzamiento de una canasta básica con precios congelados no podrá hacer frente a más de tres años de políticas neoliberales que puso en riesgo a varias generaciones con medidas que perjudican la calidad de vida de las grandes mayorías. Cambiemos destruyó la producción nacional, generando el cierre de fábricas y pequeñas y medianas empresas, y no fomenta el trabajo como fuente de nuevos ingresos para que más trabajadores sean incorporados al mercado y los que ya se encuentran en actividad puedan crecer. Las ventas se mantienen bajas y la economía cotidiana depende exclusivamente de la cotización del dólar según los caprichos que impone el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Como lo propone Saintout en La Plata y otros dirigentes en distintos municipios de la provincia de Buenos Aires, el único camino hacia una adopción real de transformación es lograr una unidad alternativa al macrismo que pueda en las próximas elecciones alcanzar una victoria que deposite el esfuerzo de cada trabajador y lo transforme en una mejor calidad de vida, en nuevos ingresos y en una economía que se motorice internamente, sin complicidades internacionales que jamás llegaron pese a las promesas de los funcionarios de Cambiemos.
Las clases más desprotegidas no soportan más los fuertes aumentos de los alimentos y los servicios, mientras que la gobernadora promete un mundo irreal que nunca se va a consolidar con políticas que perjudican al campo popular en su conjunto. El feroz saqueo del macrismo en la provincia de Buenos Aires y cada una de las localidades que gobierna se ha basado en tres pilares fundamentales para empobrecer a los sectores populares: educación en condiciones deplorables, un sistema de salud lejos de estar en un estado óptimo para ser puesto al servicio de la comunidad y la caída de las fuentes laborales como consecuencia del freno intencional puesto al consumo. Sólo una unidad electoral podrá frenar esta ofensiva de un gobierno que intenta quedarse con anuncios de campaña electoral, pero que luego de octubre volverá a disparar contra los que menos tienen de la misma manera que viene ocurriendo durante los últimos 40 meses.