Hasta hace pocos días pasada, los medidores de opinión señalaban que un tercio del electorado sondeado, aunque en baja, apoyaría a Mauricio Macri; otro estaría con Cristina y el tercero, indeciso pero ni con uno ni con la otra. A las encuestadoras hay que creerles con beneficio de inventario: están los datos que se publican y los reservados. Además, según quien pague el resultado tendería hacia una banda u otra. A grandes rasgos las cifras y las encuestadoras: Synopsis plantea tres escenarios de primera vuelta, variando el candidato de Alternativa Federal (Lavagna, Massa y Urtubey). En los tres figura Cristina primera (entre 35,9% y 39,8%), Macri segundo (entre 28,8% y 31,2%) y el peronista no K tercero. Rouvier, muestra en sus últimos sondeos realizados entre el 1 y 7 de abril un escenario de primera vuelta particular, con Lavagna y Massa por separado. Cristina puntea con 33,4%, seguida de Macri con 24,9%. En la pelea interna, Lavagna supera a Massa por poco: 12% a 8,7%. Luego, mide un único escenario de segunda vuelta, entre Macri y CFK con ventaja para ella. Sin proyección de indecisos, la expresidenta le saca 4 puntos (41,1% a 37,1%).
Por Vicky Castiglia / Que las encuestas pueden ser una herramienta práctica para las operaciones políticas o de prensa no es novedad, pero en general permiten una aproximación al estado de situación del escenario. Si bien hay dentro del duranbarbismo una fuerte tendencia por pensar la política a través de los sondeos. Es innegable que políticos y partidos de todas las banderas los utilizan.
Desde hace ya algunos meses, varios diarios de tirada nacional, publican en su edición dominical resultados de distintas encuestas de medición de los potenciales candidatos que podrían enfrentarse este año en las presidenciales de octubre. Éstas, funcionan además como materia prima para el análisis ya que, se supone, presentan una fotografía del escenario político actual.
¿Cristina Fernández de Kirchner será candidata?, ¿Qué pasará con Lavagna?, ¿Se unirá el peronismo?, ¿Cuánto repercute la economía en las mediciones del presidente Mauricio Macri? Escenarios de todo tipo y color son analizados por las empresas encuestadoras.
Al macrismo, la mayoría de los sondeos le viene dando mal (razonablemente, ya que el desmadre de la economía lo llevó incluso a anunciar un paquete de medidas económicas en un escenario de 182 por ciento de inflación acumulada en sus tres años de gobierno). No es casual que al momento, sólo cinco provincias no hayan desdoblado la elección para sacar de su boleta el tramo correspondiente al candidato a presidente. De hecho, trabajos de Synopsis, Aragón y Rouvier de esta semana, publicados por IProfesional, ratificaron que el Presidente sigue perdiendo apoyo para su reelección.
Synopsis plantea tres escenarios de primera vuelta, variando el candidato de Alternativa Federal (Lavagna, Massa y Urtubey). En los tres figura Cristina primera (entre 35,9% y 39,8%), Macri segundo (entre 28,8% y 31,2%) y el peronista no K tercero. Rouvier, muestra en sus últimos sondeos realizados entre el 1 y 7 de abril un escenario de primera vuelta particular, con Lavagna y Massa por separado. Cristina puntea con 33,4%, seguida de Macri con 24,9%. En la pelea interna, Lavagna supera a Massa por poco: 12% a 8,7%. Luego, mide un único escenario de segunda vuelta, entre Macri y CFK con ventaja para ella. Sin proyección de indecisos, la expresidenta le saca 4 puntos (41,1% a 37,1%).
Por su parte, Raúl Aragón realizó una medición de PASO y luego varios balotajes. Coincide con el resto en que arriba está Cristina (le da 28,5%) y segundo Macri (23%). Luego, entre los candidatos de AF, primero figura Massa (11,6%), seguido por Lavagna (9,5%) y Urtubey (9,3%). A su modo, abona la teoría Massa: que conviene ir todos a las primarias, para acercarse a un 30% como bloque. En cuanto a los balotajes, los tres candidatos de Alternativa Federal y Cristina figuran ganándole a Macri. Y también muestra el fenómeno de Lavagna para la segunda vuelta: es el que más ventaja le saca al Presidente y también aparece ganándole por mucho a la ex mandataria K.
Ahora bien, las encuestas no están exentas de polémica. Basta recordar las elecciones de 2015, cuando los sondeos estuvieron lejos de reflejar la opinión de los votantes. El sitio Chequeado realizó un repaso por los sondeos publicados durante el mes de octubre de 2015 y la diferencia con los números oficiales. Ninguna de las encuestas estuvo cerca del resultado final.
En el informe, la mayor diferencia se presentó con respecto al desempeño electoral de Macri, a quien todas las encuestas relevadas otorgaban menos del 30% de los votos y terminó obteniendo casi el 35%, cinco puntos más. En el caso de Scioli, las encuestas también le otorgaban un porcentaje mayor al que obtuvo.
En una columna publicada en El Cronista, el consultor Eduardo D`Alessio, titular de D`Alessio Irol, hizo referencia a las fallas de los sondeos electorales y especificó que entre ellas se encuentran la técnica del modelo predictivo (es más difícil predecir una conducta futura), los indecisos, la pérdida de identificación del electorado con los partidos tradicionales y la volatilidad de la intención de voto, por ejemplo. Agregó que “a esto se suman las crecientes limitaciones de los medios de recolección, dado que las encuestas domiciliarias son muy costosas y en algunas zonas inviables. En cuanto a las telefónicas, el uso de la línea fija está en retracción y los sistemas IVR con opciones pregrabadas no discriminan a quien responde. Y para los sondeos online aún se presentan algunas limitaciones en ciertos sectores etáreos o socioeconómicos”.
Asimismo, desde Chequeado, advirtieron que “entre las cuestiones que hay que tener en cuenta al momento de mirar una encuesta, podemos señalar al margen de error como una de las más relevantes” y que “otra de las cuestiones que pueden influir es la cantidad de encuestados , la zona geográfica en la que se realizaron, el hecho de ser personales o telefónicas, o quién es el que encargó y/o pagó el estudio”.
En la publicación “Fin de ciclo para las encuestas”, de Revista Anfibia, los académicos Ernesto Calvo y Marcelo Escobar sostienen que “la capacidad de utilizar a las encuestas como guía política y/o como instrumento político hace que las proyecciones generen interés pero, a su vez, suspicacia. En toda elección siempre hay `alguien que tiene la posta`, ya que sabemos `que todas las encuestas que se dan a conocer son operaciones políticas`. Estas percepciones dan cuenta de los usos de las encuestas más que de la realidad. Militantes y políticos usan la información de las encuestas para operar, para convencer. La existencia de una masa de información, cientos de encuestas, alimenta las fantasías de que alguien tiene la posta y de que alguna gente es partícipe privilegiado de estos datos. Esta creencia sobrevive porque cuando la política se satura de información, el resultado agregado de las encuestas tiende a estar cerca del resultado final”.
En las elecciones legislativas de 2017, sólo el 30 por ciento de las encuestas publicadas en los medios cumplieron con la ley electoral. El sitio Chequeado analizó por aquel entonces 35 notas periodísticas publicadas en los principales medios web desde el sábado 25 de junio a la medianoche, cuando finalizó el plazo oficial para inscribir a los candidatos con miras a las elecciones PASO. Estas notas, a su vez, hacen referencia a 45 encuestas o sondeos de opinión, ya sean nacionales, de la Provincia o de la Ciudad de Buenos Aires. De estas 45 encuestas que se difundieron en los medios, sólo en 14 casos las empresas informaron tanto su metodología como el financiamiento a la Cámara Nacional Electoral. Es decir que apenas 31% de las encuestas publicadas por los medios en esa campaña cumplieron con la ley.