La situación económica que afecta a miles de familias en la provincia de Buenos Aires ha obligado a los comedores escolares a recibir cada vez a más chicos. Los gremios reclaman un aumento del 30% en los cupos desde noviembre pero el gobierno macrista respondió tan sólo con un aumento del 12% para los cupos actuales, lo cual lleva desde marzo a 24 pesos el gasto que el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia destina por cupo. En cuanto a la paritaria, este lunes se realizará la comisión técnica salarial con los gremios impuesta por el gobierno de María Eugenia Vidal, la cual no definirá ninguna oferta oficial ya que los funcionarios anunciaron que esto ocurrirá recién en la próxima reunión oficial con los representantes de los maestros. Mientras la gobernadora y su ministro de Educación, Gabriel Sánchez Zinny, reclaman que las clases tienen que comenzar en tiempo y forma, ellos mismos entorpecen la búsqueda de una solución a la negociación salarial en la que el Frente de Unidad Docente Bonaerense pide que se reconozca una recuperación salarial en relación a la pérdida del poder adquisitivo del año pasado.
Por Carlos López / Vidal sigue sin buscar una pronta solución a la negociación paritaria docente, a pesar de que se exprese en los medios de comunicación abierta al diálogo y aunque pida que se cumpla la fecha para el inicio del ciclo lectivo. La gobernadora macrista convocó para este lunes a una Comisión Técnica Salarial, lo que demorará la resolución de la paritaria a menos de dos semanas de la fecha establecida para el inicio de las clases. Desde el Frente de Unidad Docente Bonaerense (Suteba, FEB, Udocba, Sadop, AMET) le reclaman a la gobernadora que no estire la negociación hasta el próximo mes pero evidentemente es lo que está buscando ahora con este análisis técnico salarial que pretende imponer cercano al 6 de marzo.
El secretario general de Udocba, Miguel Díaz, afirmó que “el ambiente está caldeado, necesitamos salir de esta situación crítica salarial en la que nos ha metido el gobierno. Queremos que se nos devuelva el 15,6% del año pasado, y en segundo término pedimos una oferta para este año con cláusula gatillo”. La reunión técnica salarial será esta lunes en la biblioteca del Ministerio de Economía pero no se realizará una oferta, sino que será la antesala al llamado oficial que prometió hacer antes del 6 de marzo el gobierno provincial.
Luego de que el director general de Escuelas, Gabriel Sánchez Zinny, haya pedido que los gremios acompañen el año con 181 días hábiles de clases, Miguel Díaz le respondió que “esto no es una cuestión de esperanza, sino de redistribuir los ingresos hacia los salarios. El gobierno tiene que volcar los fondos para educación, para comedores e infraestructura. Si hubiera una voluntad seria, se puede acordar en quince minutos, pero tenemos mucha expectativa y nos toman el pelo”, afirmó.
La situación crítica alcanza a todo el sistema educativo. Los comedores escolares en la provincia se encuentran ante una crisis sin fin, ya que Cambiemos se niega al pedido que realizan los gremios para lograr una ampliación del 30% de los cupos por la compleja situación económica que atraviesan miles de familias. La provincia tomó la única medida de aumentar un 12% el valor del cupo del Servicio Alimentario Escolar (SAE) desde marzo próximo y otro porcentaje igual que será impactado desde mayo. Con el aumento que se verá reflejado este mes próximo, el Ministerio de Desarrollo Social que conduce Roberto Gigante estará aportando unos 24 pesos por cupo en cada comedor, lo que queda muy por debajo de los valores que asegurarían una correcta alimentación de los menores y que requiere más inversión según los indicadores que marcan un aumento del 53,5% durante 2018 de los precios de la canasta básica alimentaria (CBA).
En la última reunión paritaria el gobierno anunció este aumento, lo que los gremios consideraron insuficiente -habían pedido al menos un 30% de nuevos cupos en noviembre del año pasado- para afrontar la difícil situación que los comedores tienen que enfrentar en tiempos macristas. La secretaria general adjunta de Suteba, María Laura Torre, explicó que “esto es una bomba de tiempo. Ellos se manejan con la asistencia media: si un aula tiene veinticinco chicos, ellos calculan que van dieciocho a comer. Siempre dan menos con respecto a la cantidad de pibes”, denunció. Además, recordó que los pedidos gremiales responden a que “casi el 50% de los niños y niñas de la provincia están por debajo de la línea de la pobreza”.
El sector universitario también está siendo castigado con las políticas educativas de Vidal que atentan contra la educación pública y las instituciones de formación superior. La Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu) rechazó la última oferta del gobierno nacional que contempla un aumento del 4% que se sumaría al 5% otorgado a fines de enero, y además convocó a un paro nacional para el próximo 6, 7 y 8 de marzo. El secretario general de la Conadu, Carlos De Feo, afirmó que lo propuesto por los funcionarios macristas “es menos de la mitad de lo que ya perdimos por la inflación y todavía falta marzo, que puede ser un 3% más acumulativo, lo que sería una diferencia mayor al 20%”. El dirigente advirtió también que las universidades más chicas cuentan con presupuestos que condenan su futuro, mientras que las grandes universidades son las únicas que pueden continuar trabajando aunque con muchos inconvenientes. “Hay un ajuste muy grande en las universidades. El presupuesto para este año prevé un aumento no mayor al 30% en el mejor de los casos para algunas universidades, cuando el año pasado la inflación fue del 47%. Ya hay un 17% de pérdida y la inflación para este año, según el propio gobierno, va a ser del 30%”, precisó De Feo.
La gobernadora María Eugenia Vidal le miente a los bonaerenses. Lo viene haciendo desde que comenzó su gestión con cada trabajador que ha sido engañado con indicadores que nunca se cumplen, como la baja de la inflación, o la falta de medidas que permitan nivelar una recuperación del poder adquisitivo. Es que la capacidad extorsiva de Cambiemos no conoce límites. Es así como este fin de semana en su “sorpresiva” visita a algunos vecinos de Pilar y Escobar para dialogar sobre los objetivos de la campaña electoral Vidal se mostró comprensiva con una mujer en una historia que la gobernadora compartió en su cuenta de Instagram. Resulta ser que la mujer que actuó como vecina se llama Patricia Erazo y es quien conduce un comedor en el Barrio Villa Botte que recibe ayuda oficial de Cambiemos.
Erazo no es una desconocida que apoya su gestión como una ciudadana que se mostraba agradecida por la visita, sino que ya es la tercera vez que aparece en spots del gobierno e incluso se la había visto en un video de enero compartiendo un encuentro con la ministra de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley. De la misma manera, antes había aparecido en un video publicado por el conductor de la juventud Pro, Peter Robledo, quien en un video que publicó en su cuenta de Twitter intenta ocultar el montaje de Cambiemos advirtiendo que “vinimos de sorpresa, ahora vamos a ver cómo reacciona”, en una visita que dan a entender fue al azar para comunicarse con algunos vecinos de Escobar y que finalmente terminó en la casa de Erazo.
Mientras en las redes se muestra cercana a los barrios más humildes, la realidad demuestra que la gobernadora no tiene ningún interés en pensar en los que más necesitan o en los más chicos. Porque a sus referentes en los barrios, como ocurrió en Escobar, Vidal les promete ayuda oficial para los comedores mientras que la coordinadora nacional de Barrios de Pie, Silvia Saravia, denuncia que la gobernadora «no entrega alimentos a los comedores comunitarios desde diciembre», tal como lo hizo en la última movilización del viernes pasado en la que distintas organizaciones sociales se movilizaron a la casa de la provincia de Buenos Aires en Capital Federal y a los ministerios de Desarrollo Social y de Trabajo bonaerenses ubicados en La Plata.
La presidenta del bloque Unidad Ciudadana FPV – PJ en la Cámara de Diputados de la provincia, Florencia Saintout, luego del último temporal que sufrió La Plata, ciudad donde reside y donde fue concejala, llamó a la unidad entre los vecinos para acompañar las candidaturas del kirchnerismo en este año electoral y oponerse al saqueo macrista que termina con las esperanzas de lograr una mayor calidad de vida para las grandes mayorías porque “ellos creen que pueden aniquilarnos, pero es nuestra responsabilidad volver a gobernar para devolverle la dignidad a la gente”.
La legisladora kirchnerista esta semana avanzó con su proyecto de expropiar las viviendas que se encontraban en construcción en el marco de la iniciativa «Ellas hacen» que se desprendía del programa nacional “Argentina trabaja”, y que fueron paralizadas en 2015 por decisión del gobierno macrista. El programa tenía el objetivo de que las mujeres en situación de vulnerabilidad pudieran acceder a un trabajo mediante la conformación de cooperativas y trabajar para mejorar sus barrios, capacitarse y culminar sus estudios primarios o secundarios. Sin embargo, con la llegada del macrismo al poder el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación pausó el envío de fondos destinados al proyecto. «Esta se trata de una de las tantas políticas de inclusión que buscó generar nuevas oportunidades para las más humildes, y que concluyó siendo vaciada por Cambiemos», declaró Saintout.
La política pública de Vidal es inexistente. Su programa político se basa en seguir perjudicando la economía de las grandes mayorías que reclaman a gritos una mayor asistencia con justicia social y fuentes laborales que aseguren una estabilidad contra la inflación. Desde que comenzó el verano en la costa atlántica, la gobernadora se mostró permanentemente con su equipo al servicio de la campaña electoral, olvidando los problemas que hoy tienen millones de bonaerenses que no son escuchados. Protegida por los medios de comunicación en los que distribuye su pauta oficial, Vidal se muestra en montajes mediáticos con vecinos, demostrando que una nueva victoria electoral sólo es posible a través del engaño. Las carteras más importantes como Educación, Salud o Desarrollo Social se encuentran en alerta y los salarios cada vez alcanzan para menos. Por ello alternativas como la que encabeza Saintout son necesarias en cada municipio y a nivel provincial; consolidar un frente unido es la única salida a un gobierno macrista que olvida a los trabajadores, la educación y el futuro más chicos.