Docentes, estatales, judiciales y profesionales de la salud no olvidarán fácilmente al gobierno de María Eugenia Vidal porque los obligó a ponerse frente a una crisis que genera despidos, aumento de la desocupación y hambre. Un gran grupo de intendentes bonaerenses del Partido Justicialista esta semana se unieron para declarar la emergencia económica, social y alimentaria en sus distritos, apuntando principalmente a que la gobernadora no los atiende ni formula ningún tipo de respuesta para resolver las preocupaciones de los distritos. A diferencia de los esperado, el equipo de Vidal salió al cruce de los jefes comunales y los responsabilizó por la crisis que el propio gobierno macrista genera a distintos niveles de la economía provincial. Este martes próximo los docentes cumplirán una semana consecutiva de lucha permanente contra el cierre de las paritarias y la falta de acciones por la compleja situación de infraestructura en las escuelas. Los médicos sufrieron nuevos despidos en el Hospital Posadas y la situación en los hospitales se encuentra a la deriva, siendo La Plata la principal muestra de casos con establecimientos sin recursos. Vidal gestiona un saqueo histórico en la provincia y castiga a los que menos tienen, mientras que la pauta oficial sigue aumentando para limpiar su imagen frente a las cámaras de televisión.
Por Carlos López / La crisis social y económica que afecta al conjunto de los trabajadores esta semana pasada produjo la movilización de miles de personas por las calles de La Plata, en la misma línea que ocurrió la marcha hacia Plaza de Mayo en la Capital Federal. La gestión de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires genera más pobreza y desocupación, lo que pone en alerta a las organizaciones sociales y los gremios. Las carteras de educación y salud fueron dos de las más brutalmente afectadas por los recortes que el gobierno provincial decreta, sin importarle los despidos que se generan en distintas dependencias, perdiendo puestos de trabajo y provocando además una considerable complicación en la continuidad de las actividades laborales que cumplen con servicios fundamentales destinados a los ciudadanos.
En Salud, el miércoles pasado 80 profesionales del Hospital Posadas de Morón llegaron a la institución y fueron notificados de que habían sido despedidos, lo que originó a su vez la renuncia Secretario de la Fundación Posadas y Jefe del Equipo de Cirugía Cardiovascular Infantil del Hospital, Christian Kreutzer. Con esta nueva ola de despidos el hospital que forma parte de los más concurridos en el Conurbano Bonaerense superó los 300 despedidos en lo que va del año, siendo que los médicos que allí se desempeñan reclaman desde hace tiempo que la cantidad de profesionales no es suficiente para responder a la gran demanda de pacientes, muchos de ellos con cuadros de alta complejidad.
Estos despidos se suman a las 120 personas, entre ellas una gran cantidad de enfermeras especializadas, que se quedaron sin trabajo a comienzos de este año por oponerse a una directiva de la dirección del Hospital que buscaba extender la jornada laboral a 10 horas. Además, los 80 profesionales cesanteados esta semana fueron notificados en el medio del paro por 48 horas que realizaba la Asociación de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (CICOP) como consecuencia de la falta de reaperturas paritarias. En lo que va del año, la gobernadora macrista sólo convocó a una reunión paritaria con los médicos el 14 de junio, día en el que rechazaron la oferta del 15% de aumento en tres tramos, siendo que la proyección de la inflación anual en ese momento rondaba los 30 puntos porcentuales y ahora ya se estima que supere los 40. En diálogo con el portal Infocielo el Secretario de salud gremial de CICOP, Pablo Macielo, aseguró que en el Posadas y muchos otros hospitales provinciales la situación es extrema porque “tenemos guardias incompletas y dificultades para conseguir profesionales que se incorporen al sistema. Estamos trabajando en condiciones de altísimos riesgos para pacientes y trabajadores”, precisó.
En La Plata, la situación de los centros médicos sigue siendo alarmante. A las ya conocidas complicaciones edilicias y de faltas de recursos en los hospitales ahora se suman los Centro de Salud que no tienen la cobertura necesaria para afrontar las complejidades que enfrentan. Este es el caso del Centro de Salud N° 15 de Tolosa, ubicado en la zona de 520 y 118, lugar donde los vecinos hicieron un abrazo simbólico para reclamar que el gobierno municipal de Julio Garro -en complicidad con el provincial- lleva adelante un vaciamiento recursos humanos y material para cumplir con los servicios para los barrios con severas complicaciones económicas como son Mercadito, Barrio Nuevo, Churrasco, La Unión, La Vieja Unión, La Bajada y Ringuelet. Misma situación atraviesa el Hospital San Roque de Gonnet, donde esta semana también se realizó un abrazo simbólico a los médicos encabezado por la presidenta del bloque de Unidad Ciudadana – FpV – PJ en Diputados de la provincia, Florencia Saintout, quien se ha consolidado en los últimos años como una referente de lucha para las organizaciones sociales y los trabajadores del campo popular que resisten a las políticas del macrismo.
Con respecto a los docentes, la disputa con el gobierno provincial se encuentra lejos de mejorar porque la gobernadora puso como objetivo principal oponerse a los reclamos de los gremios y cerrar cualquier camino viable para fortalecer una negociación, precisamente en un contexto de recesión y crisis económica que afecta a todos los trabajadores en su conjunto. Vidal, que este fin de semana volvió a realizar su habitual timbreo por algunos barrios selectos, cargó la última semana contra los intendentes porque considera que las problemáticas en Educación en algunos casos se corresponden con una “ausencia del Estado y un desgobierno” municipal, tal como fue el caso de Moreno, donde apuntó a la Municipalidad como principal responsable.
Ante esto, la secretaria general del Suteba de Moreno, Mariana Cattaneo, aclaró en declaraciones al diario Página/12 que la Provincia «avanzó en cartas-acuerdo con los municipios y en algunos casos, como en el de Moreno con el intendente Walter Festa, les transfirió el dinero destinado a la Educación. Después apuntan los cañones a que los intendentes no gastan supuestamente todo el dinero en Educación porque sabemos que los intendentes ante la necesidad echan mano de los fondos, quizás hasta para pagar sueldos. Siempre fue así y Festa no es una excepción, es la regla, pero eso no exime a la provincia de la responsabilidad en el sostenimiento de los edificios. El sostenimiento de las escuelas no es municipal», explicó.
Asimismo, la dirigente apuntó contra la administración de Vidal porque las irregularidades en los consejos escolares no son controladas como deberían y después cuando la seguidilla de problemáticas sale a la luz, la provincia echa responsabilidades sobre los municipios, cuando en realidad fue una decisión de la propia gobernadora en diciembre del año pasado disolver la unidad ejecutora provincial que se encargaba de la edificación de nuevas escuelas y el mantenimiento de las cientos que necesitan ser reacondicionadas. Cattaneo recordó que “al eliminar esa unidad consolidaron la paralización de las obras. No le pagaron a nadie, pero tampoco rescindieron los contratos, entonces dejan las obras paradas. Ahora retomaron el tema por la muerte de Sandra Calamano y de Rubén Rodríguez porque si no todo sería como siempre”, expresó, al mismo tiempo que confirmó que en los comedores escolares la situación es vergonzosa porque “diez días después de las dos muertes los proveedores empezaron a distribuir los alimentos secos”, denunció.
Es que la relación del gobierno de Vidal con el Frente de Unidad Docente -integrado por los gremios Suteba, FEB, Udocba, Amet y Sadop- se encuentra en uno de los peores momentos. El pasado 11 de septiembre, día del maestro, los docentes comenzaron una semana de lucha hasta el próximo martes como resultado a la falta de respuestas del gobierno ante el pedido de mejorar las instalaciones y la seguridad en las escuelas y volver a discutir las paritarias salariales, muy por debajo del índice de la inflación actual. A nivel nacional los reclamos mencionados se suman al pedido de derogación del decreto que cerró la paritaria nacional, garantizar el Fondo de Incentivo Docente y brindar una solución a los problemas de infraestructura. A su vez, en el plano universitario, los profesores reclaman mayor presupuesto universitario y continuación de los programas de becas que imposibilitan seguir con las metodologías de investigaciones y trabajos becados.
Lo que sí hizo Vidal la semana pasada fue anunciar un aumento del 15% en las jubilaciones mínimas, asignaciones familiares y programas alimentarios orientados a los sectores más vulnerables a partir de octubre para anticiparse a la recesión y el deterioro económico que traerán la devaluación del peso, el ajuste del gasto público y la falta de empleo cada vez más más notoria. Vender una mentira para solventar meses y meses de un ajuste profundo que se encuentra muy lejos de llegar a su fin. Y, además, la gobernadora se excusa frente a las cámaras de televisión para atribuirle la crisis a los intendentes que según ella no distribuyen los fondos enviados por su administración. Sin embargo, su versión se distancia mucho de la realidad que viven los jefes comunales, ya que el martes pasado un amplio grupo de intendentes del PJ bonaerense avanzó con la declaración de la emergencia económica, social y alimentaria en sus distritos, para de alguna manera poner en agenda mediática una realidad que el gobierno trata de ocultar.
En un comunicado, los intendentes sostuvieron que «hubiésemos querido escuchar a la gobernadora, saber cuáles eran sus propuestas. Hace más de mil días que vienen profundizando la crisis que ellos mismos desde el gobierno han generado, implementando un programa que excluye y margina a la mayoría de los argentinos». Es que los intendentes no comprenden la falta de diálogo que Vidal impone en toda la provincia, cuando el país atraviesa corridas cambiarias casi de manera semanal, lo que se suma al conflicto que generó en los municipios con arraigo en el campo la decisión presidencial de eliminar el Fondo Federal Solidario, conocido como fondo sojero.
En la reunión en Ituzaingó que se tomó la drástica medida de declarar la emergencia de manera conjunta, estuvieron presentes los intendentes Alberto Descalzo del distrito anfitrión, junto a Juan Zabaleta (Hurlingham), Julio Zamora (Tigre), Walter Festa (Moreno), Verónica Magario (La Matanza), Fernando Gray (Esteban Echeverría), Andrés Watson (Florencio Varela), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Gabriel Katopodis (San Martín), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Ariel Sujarchuk (Escobar), Gustavo Arrieta (Cañuelas), Juan Ustarroz (Mercedes), Aníbal Regueiro (Presidente Perón) y Hernán Yzurieta (Punta Indio). Todos coincidieron en que Vidal lleva a la provincia por un camino peligroso para la estabilidad de los bonaerenses, por lo que expresaron que “lamentamos que, ante semejante crisis económica y social, ante la creciente ola de desocupados y los desmedidos aumentos en las tarifas, la gobernadora no haya convocado a los intendentes, que somos los que todos los días estamos en contacto con nuestros vecinos y vecinas”.
Pero Vidal no escucha a nadie más que a sus ganas de llevarse puesta a la provincia. Si ni siquiera los intendentes consiguen una respuesta para reunirse, menos lo podrán hacer los millones de bonaerenses que siguen pidiendo explicaciones a los ajustes permanentes y los despidos que se dan tanto en el sector público como en el privado, y según lo expresado por Macri con vistas a continuar profundizándose hacia 2019. La gobernadora esta semana pasada estuvo en el programa televisivo Intratables que se emite por América TV, donde no sólo fue protegida por el panel con mayoría de periodistas macristas que nutren el programa, sino que además defendió su gestión del saqueo con frases futuristas al mejor estilo Macri como “este río lo vamos a cruzar y llegaremos a la orilla”, o expresar copiando al discurso del presidente que “tuvimos una dificultad en un camino que sigue siendo el correcto. Creo que no es una crisis más, puede ser una crisis que definitivamente nos lleve a un lugar mejor”, sostuvo.
Lo que aporta Vidal son discursos vacíos de contenido político y social, cuando lo que realmente le importa al ciudadano ante la realidad que atraviesa el país es cómo hacer para llegar a fin de mes con algo más de dinero en el bolsillo o cómo articular políticas que permitan seguir viviendo sin tener que dejar la mayoría del salario en un alquiler o en pagar facturas de servicios como la luz o el gas. La estrategia macrista es endeudar a la provincia cada vez más, generar los caminos para salvar algunos negocios internos y saquear hasta que dure la gestión. Cambiemos está vacío de plataforma política alguna que pueda sostener un crecimiento estable porque el objetivo del macrismo no es llegar a un buen puerto con todos los ciudadanos arriba del barco. Muy lejano a esto, Vidal y Macri son lo mismo porque ambos contribuyen a la desigualdad social y producen que miles de argentinos hoy no tengan un presente ni un futuro seguro. Ni millones destinados a la pauta publicitaria oficial ni las mentiras oficiales podrán exculpar a Vidal de ser autora de una crisis que hunde a la provincia de Buenos Aires en deudas y pobreza.