Los techos paritarios y la falta de inversión en mantenimiento en estas tres áreas nodales de la administración provincial, ponen en evidencia que la política pública de María Eugenia Vidal seguirá siendo no dar ningún tipo de respuesta, con la excusa del ajuste que lleva adelante Cambiemos para afrontar una crisis a la que el propio gobierno se encaminó. En la provincia de Buenos Aires desde el jueves pasado se encuentra declarada la emergencia educativa en la Cámara de Diputados, pese a que el ministro Gabriel Sánchez Zinny sigue sin dar respuesta alguna. La presidenta del bloque de Unidad Ciudadana – FpV – PJ, Florencia Saintout, celebró la iniciativa de los legisladores, pero también alertó que “no podemos seguir admitiendo una gobernadora que jamás de respuesta, que siga sin dar la cara. Este gobierno del hambre destruye la educación pública”. Es que la muerte de dos profesionales en la escuela N° 49 de Moreno no fue suficiente para que los accidentes -evitables, por cierto- continúen ocurriendo con caídas de ascensores en edificios públicos, masivas pérdidas de gas y explosiones de caños de agua o desagüe. El próximo jueves los docentes volverán a marchar a nivel nacional, en el marco del paro que confirmó la Ctera para enfrentar a las políticas de vaciamiento del gobierno macrista.
Por Carlos López / La situación educativa en la provincia de Buenos Aires es alarmante. Pese a los reclamos permanentes de los gremios y las distintas instancias de negociación con la administración de Cambiemos, la gobernadora María Eugenia Vidal no frena el saqueo en una de las carteras más importantes del territorio bonaerense, lo que pone en riesgo a la estabilidad laboral y económica de los docentes y perjudica a miles de niños que se ven afectados con menos días de clases. Las principales causas que marcan una crisis histórica en el área educativa son la falta de criterio para encarar las paritarias por parte del Ejecutivo provincial y una desidia total por el mantenimiento y reacondicionamiento de las escuelas, lo que provoca que varias de ellas en la provincia deban permanecer cerradas para evitar posibles accidentes.
En la última sesión de la Cámara de Diputados bonaerense, el pasado jueves, los legisladores dieron lugar al proyecto para declarar la Emergencia en Infraestructura Educativa que impulsó la presidenta del bloque de Unidad Ciudadana – FpV – PJ, Florencia Saintout. Tal como fue publicado por el portal de la Cámara Baja luego de la sesión, el proyecto declaró la emergencia “en materia de Infraestructura de los establecimientos educativos de gestión estatal en el ámbito de la provincia de Buenos Aires por el transcurso de 12 meses, con la posibilidad de que por única vez pueda extenderse por un año más”. La finalidad del mismo es solucionar en forma urgente los problemas de Infraestructura existentes en los colegios, realizando las obras necesarias para garantizar los servicios esenciales de los edificios escolares y posibilitar el bienestar general tanto de docentes como personal auxiliar y alumnos en general. Además, se avanzó en la creación de una Comisión Bicameral de Emergencia y Plan de Obras de Infraestructura Escolar que estará formada por cinco diputados y tres senadores, y ejercerá funciones de seguimiento, fiscalización y control para que la ley se cumpla en tiempo y forma.
Saintout, luego de lograr la aprobación de la emergencia después de varios meses de solicitarlo exclusivamente ante Vidal pero sin respuesta alguna, explicó que “junto al bloque de senadores de Unidad Ciudadana hemos pedido y seguimos pidiendo a la gobernadora Vidal la remoción de (Gabriel) Sánchez Zinny como director, porque él tiene responsabilidades con lo que viene sucediendo en las escuelas de la provincia de Buenos Aires y con la muerte de Sandra y de Rubén -ambos profesionales de la educación que fallecieron en la explosión de la escuela N° 49 de Moreno, provocada por una pérdida de gas-”.
Es que el bloque que preside la ex concejala platense y ex decana de la Facultad de Periodismo de la UNLP en los poco más de nueve meses que lleva el corriente año, presentó 19 proyectos legislativos con el fin frenar las políticas agresivas de la gobernadora contra la educación pública. Es por ello que Saintout afirmó que “el gobierno de María Eugenia Vidal empezó su gestión poniéndose como enemigo a los que vienen denunciando. Primero contra los sindicalistas y luego a los maestros, estigmatizándolos. No podemos seguir admitiendo una gobernadora que jamás de respuesta, que siga sin dar la cara. Este gobierno del hambre destruye la educación pública”, alertó Saintout.
Luego, remarcó que el cierre de la Unidad Ejecutora que se encargaba del mantenimiento de las escuelas en la provincia -lo que como agregado provocó el despido de 380 trabajadores de esta entidad- fue la medida de Vidal que en diciembre pasado marcó el comienzo de una lucha en conjunto entre gremialistas, maestros y legisladores para torcer el brazo del autoritarismo con el que la mandataria provincial de Cambiemos provocó el actual deplorable estado edilicio, el desarme de los Equipos de Orientación Escolar, el servicio alimentario municipalizado, entre otros puntos que ponen en peligro a la educación pública.
Una vez que la reciente ley aprobada entre en vigencia, el Director General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Sánchez Zinny, deberá presentar personalmente en el término de treinta días un informe público y detallado de la situación de infraestructura en los establecimientos de cada uno de los 135 municipios bonaerenses y los 25 distritos escolares de la provincia para evitar que se siga profundizando la crisis de las instalaciones. Además, la gestión de este plan de obras deberá comenzar a ejecutarse en un plazo no mayor a los treinta días desde el jueves pasado.
La realidad de la provincia que comanda Vidal se encuentra alineada con la situación a nivel nacional, razón por la cual los docentes nucleados en la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) harán un paro a nivel nacional este jueves próximo “en defensa del presupuesto educativo”. Con Macri al poder los fondos para la mejora constante en materia educativa han quedado en el olvido, con graves decisiones políticas que quitaron derechos a los trabajadores como la pérdida por decisión unilateral de la paritaria nacional o la suspensión de la inversión en infraestructura escolar y en la Universidades públicas, como así también la no continuidad del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y del Fondo Compensador.
En particular a lo referido con la cuestión salarial, en la provincia de Buenos Aires sigue sin existir un acuerdo, ya que en la última paritaria del 23 de agosto el gobierno propuso un aumento salarial del 19% y el pago de material didáctico con el que elevaba la mejora al 20,7% hasta septiembre, pero los gremios rechazaron la propuesta con el sustento de la fuerte devaluación a la que llevó el gobierno al país a partir del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que adelanta una posible inflación anual que según cifras oficiales (calculadas cuidadosamente para no afectar la imagen presidencial) ya supera el 34% pero que bien podría trepar a un índice superior al 40% si se toma en cuenta que se podría mantener la constante de inflaciones mensuales que rondan el 4%.
En este sentido, el domingo pasado la secretaria general de Ctera, Sonia Alesso, fue entrevistada por el diario Página/12 y explicó que el paro se produce “en alerta por la educación” porque “se viene desinvirtiendo este año y en 2017 en todo lo que tiene que ver con infraestructura, salarios docentes y escuela de educación técnica” y adelantando la ya inevitable profundización de la crisis social para el próximo año estimó que “si se vota el presupuesto que el gobierno está planteando, va a ser un presupuesto de ajuste con menor inversión educativa”. Por estas razones será la marcha de los docentes el jueves 13 de septiembre desde el Palacio Pizzurno hacia el Congreso de la Nación.
Alesso, también se sumó a la lucha que los gremios y legisladores opositores encaran en la provincia de Buenos Aires para solicitarle a Vidal que deje de mirar para un costado y solucione las problemáticas edilicias que pone en riesgo la vida de miles de niños y docentes. “A medida que la inversión educativa disminuye por supuesto que el tema de la infraestructura escolar es grave. En el caso de la provincia de Buenos Aires hay 840 escuelas que todavía están con problemas graves de infraestructura. También hay otras provincias con problemas edilicios. Es un tema grave y el gobierno no está tomando conciencia de la dimensión que tiene. A medida que la inversión educativa disminuye empiezan a aparecer estas situaciones, no solamente de salarios sino de condiciones de trabajo. Creo que la terrible muerte de Sandra y de Rubén en la escuela N° 49 de Moreno expresa lo que pasa cuando hay problemas de infraestructura o de desinversión educativa, que no es solo un tema de los docentes sino que además afecta a la comunidad educativa en su conjunto”, precisó la dirigente gremial.
Unas 800 escuelas provinciales tienen problemas relacionados al mal estado de las edificaciones o problemas en las instalaciones de servicios, siendo el municipio de José C. Paz el que presenta el caso más alarmante con 18 escuelas sin conexión de gas según el último relevamiento que el Frente de Unidad Docente Bonaerense entregó al ministro de Educación de Vidal. La situación edilicia en la provincia no sólo afecta a escuelas, sino también a otras instituciones públicas como ocurre con la salud y la justicia.
En el sector de la salud, otro de los espacios que han sido olvidados por Vidal, en los últimos meses ocurrieron accidentes que también demuestran la falta de mantenimiento. La semana pasada un ascensor cayó desde el quinto piso con un paciente y un camillero en el Hospital Evita de Lanús. Misma situación se había dado hace dos meses cuando el ascensor que cayó desde un segundo piso fue el del Hospital San Roque de La Plata con cuatro personas adentro. Al igual que ocurre en educación, la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP) aseguraron haber denunciado una y otra vez “los graves problemas que padecemos a diario en hospitales y centros de salud” y remarcaron que “lo hemos hecho públicamente, en las reuniones paritarias y en los escasos encuentros con los funcionarios provinciales. No hemos sido escuchados y, lamentablemente, los resultados están a la vista”.
Hace dos semanas también un ascensor de la Torre 2 de la Municipalidad de La Plata sufrió una caída con tres personas adentro. Además, en la Torre 1 que también se ubica en la capital bonaerense explotó un caño de agua, provocando la inundación de varios pisos del edificio administrativo. Misma situaciones de alerta sufren instituciones como la sede de IOMA ubicada en calle 46 de La Plata y los tribunales de 13 y 47 de la misma ciudad, donde esta semana pasada de desplomó un bloque de cielorraso del Juzgado Civil y Comercial N° 23, cayendo pedazos del techo y una lámpara sobre el escritorio de una trabajadora, lo que desde la Asociación Judicial Bonaerense fue denunciado como consecuencia “del abandono y la falta de sensibilidad” que ha adoptado el Poder Judicial con el gobierno de Vidal.
En Moreno esta semana pasada las organizaciones sociales y docentes marcharon nuevamente contra las políticas de desfinanciamiento de la educación pública que mantiene el municipio en línea con lo exigido por la gobernadora macrista. «Que nadie venga con amenazas ni aprietes porque estamos haciendo un reclamo justo; el Gobierno provincial está realizando un brutal ajuste en salud y educación que nos está matando y está vaciando las escuelas y ámbitos estatales», advirtieron en un comunicado que fue distribuido al llegar a la sede del Consejo Escolar, en relación a la medida que dispuso el gobierno provincial de descontar los días de paro que hagan efectivos los docentes, tal como fue anticipado por el ministro de Educación de la Nación, Alejandro Finocchiaro, en la última conferencia de prensa que brindó para dar detalles del acuerdo en la nueva paritaria con los docentes universitarios.
Es por esta situación generalizada que los trabajadores se unifican en una lucha en común contra la falta de acción del gobierno. Vidal juega con el cansancio de los profesionales de la educación, la salud y la justicia para ganar una batalla que la tiene concentrada en perjudicar lo mayor posible al bolsillo del trabajador. La crisis económica y el acuerdo con FMI no puede ser excusa alguna para ponerle un techo a las paritarias y poner en peligro a cientos de familias que dependen de esos ingresos y ven como mes a mes el salario real pierde ante el aumento del tipo de cambio con el dólar y los consecuentes procesos inflacionarios. El gobierno de Vidal es responsable de la propia crisis que desde Cambiemos le atribuyen al mercado y como respuesta a esto lo único que ha realizado es castigar a los empleados públicos con recortes y despidos masivos.