Y si además la gobernadora María Eugenia Vidal y sus funcionarios no atienden a los docentes que venían denunciando que lo que finalmente sucedió en Moreno era previsible y evitable, bueno sería poder dónde termina la gravísima e invalidante responsabilidad política de esos funcionarios de Cambiemos y dónde deberían estar sentados frente a una fiscalía y un juzgado penal. De los $ 143.000 millones a la Educación, el 1% de ese monto corresponde a obras de infraestructura escolar, el 2% a la adquisición de insumos y el 97% al pago de salarios. El informe de la consultora se dio a conocer días después de la explosión por un escape de gas en una escuela del partido bonaerense de Moreno. Movilizaciones de padres y docentes, y escuelas paradas para prevenir más muertes.
Según un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), la provincia de Buenos Aires asignó este año un presupuesto de $ 143.000 millones a la Educación, pero solamente el 1% de ese monto corresponde a obras de infraestructura escolar, el 2% a la adquisición de insumos y el 97% al pago de salarios, con la consecuencia de “escuelas sin materiales y en pésimas condiciones edilicias”. Así consigna este martes el sitio InfoGEI.
IDESA remarcó además que, pese al alto porcentaje destinado al pago de salarios, su mala asignación “ni siquiera premia el esfuerzo y el compromiso de los docentes” y subrayó la necesidad de “modernizar los estilos de gestión”, dándole más poder a los directores de escuela y conformando “una estructura salarial que premie el compromiso del docente con el aprendizaje de sus alumnos”.
El informe de la consultora se dio a conocer días después de la explosión por un escape de gas en una escuela del partido bonaerense de Moreno, por el que murieron dos trabajadores de la educación, destaca InfoGEI.
El mismo, señaló que la provincia gobernada por María Eugenia Vidal “asignó a educación inicial, primaria y secundaria de las escuelas del Estado, un presupuesto de $143 mil millones para el 2018”, equivalentes al 1,2% del PBI nacional, “una magnitud más que importante”, equivalente a “unos $ 5 mil por alumno por mes”.
“Se trata de una inversión por alumno ni excesiva ni escasa, pero suficiente para evitar condiciones tan precarias y de tan alto riesgo para alumnos y docentes”, indicó, por lo que se preguntó “qué explica entonces que las escuelas tengan tan severas deficiencias de equipamiento escolar e infraestructura”.
En el reporte, la consultora remarcó la colisión entre la “centralización” de la administración del sistema educativo y la necesidad de “empoderar” al director de escuela, “un actor clave, ya que es responsable por los resultados pedagógicos y por la disponibilidad de medios y seguridad de docentes y alumnos”.
Por su parte, el colega Martín Granovsky publica hoy en Página 12 el revelador artículo “La carta que nadie leyó”, en el que se revela lo siguiente: “el 2 de mayo pasado, tres meses antes de la explosión, todos los gremios docentes bonaerenses le entregaron por escrito a la gobernadora el reclamo por las condiciones edilicias. Vidal reaccionó recién ayer, tras las dos muertes, cuando ordenó mandar gasistas a las escuelas de Moreno. El jueves 2 de agosto murieron, por un escape de gas, la vicedirectora Sandra Calamano y el auxiliar Rubén Rodríguez. Calamano estaba a cargo de la escuela 49 de Moreno. Por la muerte, sus colegas de las 270 unidades educativas del distrito inauguraron una modalidad inédita: se reúnen como directivos autoconvocados y juntos se niegan a que las escuelas funcionen bajo peligro. Vidal tiene una responsabilidad primaria por las condiciones de escuelas, docentes, chicas y chicos. Pero no sólo sabía qué pasaba. Además, había recibido una presentación formal. La hicieron el 2 de mayo último todos los gremios docentes bonaerenses y este diario tiene una copia del ejemplar firmado por su departamento de audiencias. ‘Vidal y Sánchez Zinny son responsables por no haber solucionado los problemas de infraestructura que conocían”, dijo anoche a este diario Inés Busso, del Sindicato Argentino de Docentes Particulares. Busso fue una de las firmantes de aquella presentación del 2 de mayo. ‘Los problemas los planteamos siempre en las paritaria’, subrayó. ‘Vidal sabía y Sánchez Zinny sabía, y son responsables’. ‘El 16 de diciembre de 2015 la gobernadora recibió a los secretarios de los gremios docentes y entre otras cosas ya entonces hablamos de infraestructura’, dijo María Laura Torre, adjunta del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires”.
Asimismo, el mismo diario consigna que “los distritos escolares de General Rodríguez y Moreno prácticamente no tuvieron clases luego de la fatídica explosión de la escuela 49. En General Rodríguez una cuadrilla del gobierno comprobó pérdidas de gas en la mayor parte de las escuelas. Hubo movilizaciones de docentes y padres de alumnos”. En otros distritos bonaerenses, como Merlo y Pilar, surgieron denuncias similares. En Mar del Plata, además, el interventor del Consejo Escolar renunció aduciendo “estrés”.
En abril se había declarado la emergencia educativa en General Rodríguez “dada la situación preocupante de las instituciones”.
A principios de julio, en la escuela N°22 del barrio Bicentenario de General Rodríguez explotó una cocina por una pérdida de gas. Aunque no hubo muertos, una auxiliar sufrió graves quemaduras.
En Merlo, la directora de la escuela primaria N°8 les pidió a los padres que entraran al establecimiento cuando fueron a llevar a sus hijos. Ahí intentó minimizar que había “pequeñas pérdidas de gas”, además de otras irregularidades, pero que de todas formas se dictarían las clases por pedido estricto de la inspectora. Los padres se resistieron a dejar a los niños en la escuela. Luego, hicieron una denuncia en el comando de bomberos del distrito, quienes junto al personal de Defensa Civil comprobaron que había cinco escapes de gas en el lugar.
Karina, madre de una alumna de primer grado, contó que la directora “empezó a sostener que no la dejaban cerrar la escuela pero todos los padres empezamos a decir que eso no era factible. Algunos se pusieron nerviosos, sacaron a los chicos de la escuela y otros quedaron adentro”.
Pero el problema no es sólo el gas. Desde la escuela N°5 de El Palomar denuncian que fueron abandonados por el gobierno provincial y el de Morón, encabezado por el intendente Ramiro Tagliaferro, ex esposo de María Eugenia Vidal. El 29 de abril la escuela fue afectada por un temporal y quedó sin techo. Y ahora denuncian que el gobierno desistió de avanzar en su recuperación.