El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, invitó con un gesto a su homólogo surcoreano, Moon Jae-in, a pisar brevemente el territorio norcoreano antes de celebrar la cumbre intercoreana en la Casa de Paz, ubicada en el lado surcoreano de la Zona Desmilitarizada de Corea (ZDC). “Ahora usted vino al lado sur, ¿cuándo puedo ir yo [al Norte]?”, dijo Moon después de conocer a Kim en la línea de demarcación militar (LDM). “Podemos ir ahora”, respondió Kim Jong-un, que acto seguido tomó al presidente de Corea del Sur de la mano y lo llevó brevemente a su país.
Ese pequeño detalle fuera del protócolo oficial representa un gesto simbólico de deshielo entre los dos países. Este 27 de abril, Kim se conviertió en el primer líder norcoreano en visitar Corea del Sur desde que la península fue dividida. El líder norcoreano ha llegado a la ZDC y ha cruzado a pie la línea de demarcación militar (LDM), siendo recibido al otro lado de la frontera por Moon Jae-in con un fuerte apretón de manos. Así sintetiza en un análisis de los hechos el sitio Pulso de los Pueblos, de Buenos Aires.
La declaración conjunta del líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente surcoreano, Moon Jae-in, firmada por ambos al final de la cumbre intercoreana, que se ha celebrado este 27 de abril, postula que ambas naciones cesan cualquier acción hostil entre ellas.
“Los dos líderes están anunciando solemnemente ante nuestra nación de 80 millones de personas y ante todo el mundo que no habrá más guerras en la península de Corea y empieza una nueva era de paz”, reza la declaración citada por la agencia Yonhap.
Al mismo tiempo, Pionyang y Seúl han prometido buscar la desnuclearización total de la península de Corea, así como la reducción paulatina de los arsenales para bajar la tensión militar.
“El Sur y el Norte han confirmado que su objetivo común es acometer una desnuclearización total en la península de Corea. El Sur y el Norte han acordado tomar medidas activas para cooperar con la comunidad internacional en el tema de la desnuclearización de la península de Corea”, sostiene el documento.
Los puntos clave de la declaración conjunta de las dos Coreas: Cesar cualquier acción hostil. Buscar la desnuclearización total de la península de Corea. Reducir paulatinamente los arsenales. Tomar medidas activas para cooperar con la comunidad internacional. Firmar un tratado de paz para finalizar formalmente la Guerra de Corea. Evitar enfrentamientos en el mar Amarillo. Celebrar conversaciones militares de alto nivel en mayo. Lograr una mejora total y completa en el desarrollo de las relaciones. Fomentar un futuro conjunto de prosperidad y reunificación. Iniciar las negociaciones en varios ámbitos y a diferentes niveles, incluido con EE.UU. y China. Celebrar las reuniones de familias separadas por la Guerra de Corea de 1950-53. Eliminar los medios de la propaganda en la frontera. Participar conjuntamente en competiciones deportivas internacionales.
El documento plasma que ambas partes firmarán un tratado de paz para finalizar formalmente la Guerra de Corea a finales de este año, 65 años después del cese de las hostilidades. También los líderes coreanos han decidido impulsar activamente las conversaciones con la participación de EE.UU. y China. En particular, las negociaciones tendrán como objetivo sustituir el régimen de armisticio en la península de Corea por el tratado de paz.
Tanto Corea del Norte, como Corea del Sur, han decidido tomar las medidas necesarias para evitar enfrentamientos en el mar Amarillo, así como garantizar la existencia de una zona de paz en esa área.
El documento prevé que la visita del presidentede Corea del Sur al país vecino se celebrará durante el otoño de este año. “El Norte y el Sur van a lograr una mejora total y completa en el desarrollo de las relaciones y, de ese modo, permitir un futuro conjunto de prosperidad y reunificación”, reza la declaración.
Asimismo, la declaración final de la cumbre intercoreana precisa que las negociaciones en varios ámbitos y a diferentes niveles entre ambas naciones comenzarán en un futuro muy cercano.
Otro punto de la declaración conjunta prevé la celebración de las reuniones de familias separadas por la Guerra de Corea de 1950-53 con motivo del Día de la Liberación, el 15 de agosto.
Además, ambos Estados coreanos van a liquidar físicamente todos los medios de propaganda que se han usado en la frontera intercoreana.
Entre los eventos conjuntos, especificados por el documento, figura también la participación en competiciones deportivas de equipos unificados, incluidos los Juegos Asiáticos del 2018.