Desde su asunción en la gobernación en 2015, María Eugenia Vidal triplica la deuda pública de la Provincia y supera los $273.060 millones de pesos. Los intereses anualizados por la deuda 2016/2017 son de 28.000 millones de pesos. Con el mismo recurso se podría aumentar un 45% a las y los docentes bonaerenses.
En un contexto de inflados tarifazos que se comen cada vez mayores porciones del salario de las familias, con una canasta básica alimentaria encarecida y salarios a baja, con un evidente ajuste en las políticas públicas que garantizan derechos, con despidos masivos, tanto en el sector público como en el privado, y con un claro deterioro de las condiciones de vida, el gobierno provincial condena a los bonaerenses con una deuda pública que no para de crecer.
Una deuda cada vez más significativa en relación a los recursos genuinos de la provincia generando un efecto de “bola de nieve” porque crecen sin parar los intereses que hay que pagar. Este año, la provincia afrontará 28.000 millones de pesos sólo en concepto de intereses. ¿Qué se puede hacer con 28.000 millones de pesos? Se podrían construir en todo 2.333 Jardines de Infantes, o comprar 95.000 patrulleros. Incluso se le podría aumentar a los docentes un 45% de su sueldo.
Según un informe del Instituto para el Desarrollo Económico y Social de la provincia de Buenos Aires “en 2017 por ejemplo, los recursos presupuestados para el pago de intereses equivalen al 77% del presupuesto del Ministerio de Salud, o al 174,7% del Ministerio de Desarrollo Social”.
Asimismo, los montos del capital de la deuda y sus intereses se incrementan ya que el porcentaje tomado en moneda extranjera aumenta su peso específico, dejándonos a la deriva de la crisis económica mundial.
También resulta llamativo y se convierte en una señal de alerta el cambio en la relación que tiene la deuda sobre los ingresos provinciales. Si en 2015 la deuda significaba un 70,3% de los recursos genuinos, ya en 2017 significaban más del 108%. Convirtiendo este proceso en una bomba de tiempo.
El jueves pasado, la gobernadora Vidal volvió a tomar deuda por 30.000 millones de pesos. Muchos medios de comunicación lo mostraron como un éxito, pero un análisis más profundo muestra que la deuda pública provincial no es más que un camino sin salida.
La deuda externa de nuestra provincia tiene el mismo tamaño que la de la India que tiene un PBI rankeado en el 6to lugar del mundo y con una población que es 10 veces más grande.
Desde el Bloque de diputados y diputadas provinciales de Unidad Ciudadana-FPV-PJ expresamos nuestra profunda preocupación en el marco de la gestión de una política de la desigualdad llevada adelante por el Gobierno provincial que sigue beneficiando a quienes más tienen pero deja a la intemperie a la gran mayoría de los y las habitantes de la provincia. Las políticas públicas en educación y salud se empobrecen de manera evidente, se habilitan los tarifazos de luz, gas, agua y transporte y no se generan políticas para frenar la inflación condenando a las familias al ring de los consumos más básicos (aunque muchas ya no llegan ni a eso), las políticas de desarrollo del trabajo se convierten en apoyo para las patronales y en la estigmatización de los sindicatos junto a la lucha de trabajadoras y trabajadores.