No obstante, el senador republicano John McCain consideró el lunes que esta cifra es solo una parte de la solución para reconstruir las Fuerzas Armadas estadounidenses. “Debemos recordar que el NDAA es solo parte de la solución a los problemas que enfrentan nuestras Fuerzas Armadas”, dijo en un comunicado. El proyecto de Autorización de Defensa Nacional (NDAA, por sus siglas en inglés) firmado este martes por el presidente de EE.UU., Donald Trump, prevé casi 700 000 millones en gastos militares para el próximo año fiscal, pero el Congreso aun debe autorizar la financiación en su totalidad.
“Con esta firma aceleramos el proceso de restaurar completamente el poderío militar de Estados Unidos. Esta legislación mejorará nuestra agilidad (…) y modernizará nuestras fuerzas y ayudará a dar a nuestros colaboradores las herramientas que necesitan para pelear y ganar”, asegura el mandatario estadounidense.
Destacar que este enorme paquete de gasto militar sobrepasa el de las siguientes siete fuerzas armadas del mundo combinadas, por lo que todavía los legisladores no saben exactamente cómo financiarlo.
Tras ocupar en enero el cargo en el Despacho Oval, Trump anunció que pretendía modernizar el Ejército estadounidense. Ya ha pedido la fabricación de armas nucleares más pequeñas y a la vez más precisas que las termonucleares tradicionales.
De hecho, el Comando Estratégico de Estados Unidos (Stratcom, por sus siglas en inglés), tras lanzar dos misiles balísticos nucleares en septiembre, aseguró que la infraestructura del arsenal nuclear de Estados Unidos necesita modernización.
En una coyuntura de máxima tensión con Corea del Norte, otra de las prioridades de Trump es desarrollar un sistema de defensa antimisiles de última generación con el fin de salvaguardar a los Estados Unidos de posibles ataques desde el extranjero. Esta reconstrucción militar incluye la fabricación de nuevos aviones, buques, recursos varios e instrumental.