Con el conteo del último voto de todos los que se emitieron el domingo, las petroleras aumentaron, el lunes mismo, hasta un 12 por ciento el precio de los combustibles en los surtidores de todo el país. El lunes 25 de septiembre, el ministro de Energía, Juan José Aranguren, había confirmado la liberación de los precios de la nafta y el gasoil a partir del 1º de octubre. Sin embargo, las petroleras hicieron buena letra y esperaron a que concluyera la elección para empezar con las remarcaciones, dejando en claro el acuerdo implícito que existió para no afectar las chances electorales del oficialismo.
Así consigna este martes en forma más que ilustrativa un artículo del diario Página 12. Es la tercera suba que se aplica en el año y el ajuste acumulado llega en algunos casos al 29,5 por ciento, casi 12 puntos por encima de la inflación oficial. De este modo, Argentina trepa al segundo lugar en el ranking de los países con combustibles más caros de América latina, siendo solo superada por Uruguay. El de los combustibles es sólo el primero de una serie de aumentos pautados para los próximos meses
“Cuando llegamos, el mundo tenía un nivel de la nafta que era mucho más barato que en Argentina. Cuando quisimos desregular e ir al precio internacional nos encontramos que en las provincias del sur, productoras de gas y petróleo, había mucha gente que se quedaba sin trabajo. Como nuestra obsesión es cuidar el trabajo y generar nuevos trabajos hicimos un acuerdo con esos sectores para hacer un precio sostén, una transición, y les dijimos: `A partir de octubre del año que viene (por 2017) ustedes van a tener que vender al mismo precio que se vende en el mundo´. Llegamos a octubre y ahora tenemos un sistema energético en el que se puede importar y exportar sin impuestos y vamos a pagar el combustible lo que vale en el mundo. Pasa que justo ahora el combustible aumentó”. Esa fue la explicación ofrecida por el presidente Mauricio Macri durante una conferencia de prensa, ayer.
“Yo soy optimista, creo que en el futuro el petróleo va a volver a bajar. Van a seguir avanzando las energías renovables”, agregó pese a que no hay forma de predecir cómo evolucionará la cotización del crudo. Claro: ¡argentinos, a joderse!
YPF, que controla más del 50 por ciento del mercado, informó ayer que en Capital Federal, el litro de nafta súper trepó 10 por ciento (19,72 a 21,71 pesos) y desde principio de año acumula una suba de 27 por ciento (17,08 a 21,71 pesos), mientras que la variedad premium subió 12,2 por ciento (22,28 a 24,99 pesos) y suma 29,5 por ciento en el año (19,30 a 24,99 pesos). A su vez, el gasoil común subió 9,1 por ciento (17,30 a 18,88 pesos) y en diez meses acumula un 21,5 por ciento (15,54 a 18,88 pesos). Por último, el gasoil premium subió 9,2 por ciento (19,88 a 21,71 pesos) y en el año 21,6 por ciento (17,85 a 21,71 pesos)
Por su parte, en Shell el litro de nafta súper aumentó 9,9 por ciento (19,99 a 21,97 pesos) y en el año subió 25,7 por ciento (17,48 a 21,97 pesos), mientras que el de premium trepó 11,91 por ciento (22,99 a 25,73 pesos) y en diez meses 28,8 por ciento (19,98 a 25,73 pesos). A su vez, el gasoil común subió 8,95 por ciento (17,76 a 19,35 pesos) y suma 18,6 por ciento (16,31 a 19,35 pesos) y el gasoil premium se incrementó 9,89 por ciento (20,51 a 22,54 pesos) llegando el acumulado anual a 18,8 por ciento (18,97 a 24,54 pesos).
Según el sitio especializado Global Petrol Prices (GPP), hasta el 16 de octubre el litro de nafta en la Argentina costaba 1,16 dólares, ubicándose en el cuarto lugar detrás de Uruguay (1,55), Chile (1,22) y Brasil (1,21 dólares). Con el aumento de 10 por ciento, el valor de la nafta en el país treparía a 1,28 dólar, quedando sólo por debajo de Uruguay. De a poco, como prometió el gobierno, el país va volviendo a los primeros lugares.