Otra vez: intimidación de Gendarmería en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) en pleno acto por Maldonado. Fue y es histórico el cántico popular para con la Policía Federal, cuando en las autodefensas contra la represión se cantaba “son la vergüenza nacional”. La Gendarmería pretende ahora ser ella portadora de la infame cucarda. Violando la autonomía universitaria, la fuerza federal irrumpió en la casa de altos estudios rosarina mientras estudiantes, docentes y no docentes reclamaban la aparición con vida del joven de 28 años. El Rectorado presentará una denuncia ante la Fiscalía. También habrá una actividad de repudio para exigir respuestas a Mauricio Macri y Patricia Bullrich.
Por Fernando M. López (*) / Mientras la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, volvía a respaldar a Gendarmería durante su visita a Jujuy, desligándola de su responsabilidad en la desaparición forzada de Santiago Maldonado, efectivos de esa misa fuerza ingresaban ayer ilegalmente a la Universidad Nacional de Rosario (UNR).
Este nuevo atropello a la autonomía universitaria no ocurrió en cualquier momento. Fue justo cuando estudiantes, docentes y no docentes de la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales realizaban un paro activo y un acto tras cumplirse dos meses de la desaparición del joven de 28 años, visto por última vez durante la feroz represión de Gendarmería en la comunidad mapuche de Cushamen, provincia de Chubut.
Los gendarmes irrumpieron con un móvil en el Centro Universitario Rosario (CUR), sede de varias unidades académicas de la UNR, pasaron por donde se desarrollaba la actividad y estacionaron frente a la Facultad de Psicología. Allí se bajaron dos efectivos armados y entraron como si estuvieran en su casa.
Cuando los directivos de esa facultad les pidieron la autorización que requiere el artículo 31 de la Ley 24.521 de Educación Superior, los gendarmes alegaron que llevaban “una notificación judicial” para un docente de la cátedra de Ingeniería Mecánica. Pero no dieron más detalles y se negaron a mostrar el documento en cuestión. Por lo tanto, no les quedó otra opción que dar media vuelta y retirarse del predio universitario.
“Más allá de la sorpresa y la preocupación, no podemos más que leer esto como un acto intimidatorio y una provocación”, dijo a Contexto Franco Bartolacci, decano de Ciencias Políticas.
Todos los decanos de la UNR elevaron una nota al rector Héctor Floriani para ponerlo en conocimiento del caso y solicitaron que se presente una denuncia ante la Fiscalía de Rosario. Según confirmó Bartolacci, la denuncia se hará este mismo miércoles.
El propio Floriani emitió un comunicado horas después para aclarar que el ingreso de Gendarmería “no contó con el aval ni la autorización de ninguna autoridad judicial ni universitaria”, y para “repudiar de manera enfática cualquier intento de amedrentamiento por parte de la fuerza pública a los miembros de nuestra comunidad, la cual goza del pleno derecho de expresar públicamente sus opiniones en el marco de las garantías que brinda el Estado de Derecho”.
“Esto es muy grave en términos institucionales y, por eso, requiere de un enérgico repudio de la comunidad universitaria, pero al mismo tiempo de todas las acciones necesarias para que pueda esclarecerse”, agregó el decano de Ciencias Políticas.
La Asociación Gremial de Docentes e Investigadores de la UNR (COAD) también condenó enérgicamente la “provocación” de Gendarmería y del Gobierno de Mauricio Macri.
“Nosotros pensamos que esta es la forma que tiene el Gobierno para tratar de imponer sus ideas, mediante la represión y la intimidación. En cada lugar lo hace de distintas formas. Lo que sufrimos docentes y estudiantes universitarios este martes, los chicos de los barrios de Rosario lo pasan todos los días. Es algo muy preocupante”, subrayó a Contexto Laura Ferrer Varela, secretaria general de la COAD.
La representante docente adelantó que hoy, a partir de las 13, realizarán una clase pública en la Plaza de la Memoria del CUR con autoridades, profesores, estudiantes, no docentes y personalidades políticas y sociales para expresar un repudio generalizado, además de exigir respuestas a Macri y Bullrich frente “a esta actitud intimidatoria y violatoria de los derechos de la autonomía universitaria”.
Maira Lignetti, presidenta del centro de estudiantes de Psicología, recordó que no es la primera vez que Gendarmería, “fuerza estatal que es cómplice y parte de la desaparición de Santiago”, amedrenta a docentes y estudiantes rosarinos.
El 7 de septiembre, mientras se desarrollaba una clase pública por Maldonado frente al Instituto Terciario “Olga Cossettini”, varios gendarmes se mostraron en los alrededores con armas y perro para intimidar a los participantes de la actividad.
Y no sólo en Rosario se dan estas acciones de amedrentamiento. La semana pasada, la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA) fue denunciada anónimamente por tratar en sus aulas la desaparición forzada de Santiago y reclamar su aparición con vida.
La denuncia, que llegó a un mail del Gobierno de la Ciudad Buenos Aires, fue remitida al Ministerio Público Fiscal porteño, que a su vez la derivó a la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación, y de ahí al Rectorado de la UBA.
Atropellos similares a la autonomía universitaria se registraron este año en universidades como las de Mar del Plata, Lomas de Zamora, San Juan y Jujuy. En esta última, la policía del gobernador Gerardo Morales no sólo ingresó ilegalmente, sino que además se llevó detenido en forma violenta a Joaquín Quispe, presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Agrarias.
(*) Periodista y docente de la UNLP. Editor de AgePeBA. Nota publicada por Contexto.