“Cualquier penalista que conozca el manejo del proceso penal y ejerza la profesión sabe que la policía, a veces por presiones políticas o por situaciones particulares, buscan perejiles y eso deriva en investigaciones tendenciosas (…). La policía tiende a trabajar de una manera tendenciosa y esto se ha instaurado desde hace años. Es un vicio de la fuerza. Cuando a una fuerza de seguridad le generan presiones para que dé respuestas o resultados, no importa que sean tendenciosos. No buscan al responsable del hecho, buscan a alguien para tener un titular que diga `Hay un detenido en la causa` (…). Si hoy se descubre que mi defendido no es responsable, es un papelón, es un escándalo judicial, hay que echar a toda la Policía y yo puedo pedir un jury de enjuiciamiento contra la fiscal porque sin elemento para imputarlo tomó posición, aún cuando la Ley del Ministerio Público Fiscal es clara respecto a que la fiscalía tiene que ser objetiva”. Parte de las declaraciones a esta agencia de Lucio de la Rosa, el abogado defensor del acusado Marcos Bazán. Aparte: hay indicios que conducen a la sospecha de una similitud entre el caso Anahí y el de la niña Candela Sol Rodríguez, de 11 años, secuestrada el lunes 22 de agosto de 2011 cerca de su casa en Hurlingham y hallada muerta el 31 de agosto de 2011; crimen sobre el cual acaban de conocerse las sentencias de los supuestos responsables, pese a que un detallado informe del Senado bonaerense, de 2012, comprobó el sistema de responsabilidades y complicidades existente entre policías, fiscales, jueces y elementos encumbrados del poder político.
Por Cecilia Valdéz / El 4 de agosto, seis días antes de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias de este año, fue hallado el cuerpo de Anahí Benítez en la reserva natural Santa Catalina, del partido de Lomas de Zamora. La adolescente había desaparecido el 21 de julio, cuando salió de su casa en Lomas de Zamora para ir a caminar. Al día siguiente de la aparición del cuerpo, fue detenido Francisco Leonardo Agostino, profesor de la escuela a la que concurría Anahí, pero, a falta de pruebas, fue liberado unos días después. El 5 de agosto también fue puesto a disposición de la Justicia Marcos Bazán, quien vivía en una casa cerca del lugar del hallazgo del cuerpo, sindicada por uno de los perros rastreadores como un lugar donde podría haber permanecido la joven. El tercer acusado, Marcelo Villalba fue detenido a mitad de mes, luego de que se reactivara el celular de Anahí en manos del hijo de Villalba, quien confesó habérselo regalado. La autopsia, además, determinó la presencia de semen en el cuerpo de la nena que se correspondían con el ADN del imputado.
Pasadas las elecciones, y tras la liberación del profesor, sólo quedaban Bazán y Villalba acusados en el caso que llevan adelante las fiscales Verónica Pérez y Fabiola Juanatey de la Unidad Fiscal 2 de Lomas de Zamora, con quienes esta agencia trató de comunicarse pero recibió una rotunda respuesta negativa.
Bazán, viene denunciado presiones por parte de elementos del poder policial para que se “auto inculpe en el crimen”. Al respecto, a principios de septiembre Infobae publicó: “El 28 de agosto pasado, cuando amplió su declaración indagatoria, Bazán manifestó que fue «apretado» por la policía para que se auto inculpe en el asesinato de la estudiante. Lo hizo así: `Dos agentes de la DDI de Avellaneda –lugar donde estaba detenido- me sacaron del calabozo y me llevaron a una habitación muy iluminada para decirme que desafecte a mi abogado –Lucio De La Rosa- de la causa y que cambie mi declaración y que ponga a mis amigos en dicha causa –es decir que los inculpe en el homicidio- y que cambie de abogado porque es muy oscuro. Estos oficiales se llaman Cuello y Petrussa y también me dijeron que iban a hacer una nota para que me saquen de la DDI y me lleven a un penal donde el papá de la chica –por Anahí- había estado preso y que tiene muchos conocidos dentro del penal y, textualmente ‘te van a hacer mierda seas o no seas el culpable`. Efectivamente el padre de Anahí purgó una condena de 18 años por asesinato en varios penales bonaerenses. Bazán cierra la escena del apriete sosteniendo que el oficial Petrussa le dice que si cambia de parecer y se declara culpable del crimen lo llame y que, mientras esto sucede el otro oficial, Cuello, tamborillea los dedos sobre la mesa del cuarto produciendo un ruido molesto”.
Siempre según Infobae, la Dirección General de Asuntos Internos, a cargo del abogado Guillermo Berra, abrió un sumario para investigar a los policías que habrían «apretado» a Bazán para que se «autoincrimine» en el homicidio, tal como lo denunció ante las fiscales del caso y de la UFI 1 de Avellaneda, el 28 de agosto pasado.
Esta agencia dialogó con el abogado defensor de Bazán, Lucio de la Rosa, quien afirmó: “no se puede negar el escenario político existente cuando la investigación dio inicio: se venían las Primarias y el de Lomas de Zamora es un municipio muy cuestionado en materia de seguridad. Había que encontrar un responsable, el hecho era una atrocidad, había aparecido el cuerpo de la nena, enterrado, y creo que ellos (los investigadores) esperaban que Bazán tuviera un defensor oficial, puesto que se trata de un ‘hippie’ que consume marihuana, que no vive con grandes lujos, con una vida desconectada del mundo, que lo único que hacía era ir a trabajar”.
Asimismo, contó que realizó una denuncia en la UFI especializada de Avellaneda por las presiones que recibió su cliente por efectivos de la bonaerense. Añadió que, efectivamente, Bazán fue citado en carácter de víctima y que declaró dando cuenta de los hechos. Ahora la fiscalía solicitó saber qué participación tuvieron ambos efectivos en la investigación pero, según relató el abogado, “ambos funcionarios tienen vinculación con la madre de la víctima”.
“Cualquier penalista que conozca el manejo del proceso penal y ejerza la profesión sabe que la policía, a veces por presiones políticas o por situaciones particulares, buscan perejiles y eso deriva en investigaciones tendenciosas”, dijo Rosas a AgePeBA.
Han sido varios los elementos utilizados por la fiscalía para apuntar contra Bazán. Entre ellos una tijera de Anahí que habría sido encontrada en su domicilio, una pala con tierra que se habría usado para enterrar el cuerpo, y una llave –hallada recientemente- que habría pertenecido a la adolescente y que, se afirma, permitiría abrir la puerta de la casa del imputado. Sin embargo, por el momento no ha sido posible establecer una relación o vínculo entre Bazán y Villalba o, entre Bazán y Anahí.
“La prueba más concluyente para vincular a Bazán al caso fue el rastro del can Bruno, pero nosotros solicitamos la investigación de un perito porque creemos que ese rastrillaje estuvo mal hecho. Ahora bien, ¿pudo haber pasado que Anahí haya estado donde indica el can? Sí, pero hay que considerar que hubo días en los que él no estuvo en su casa porque se fue con su novia, además de que también él por esos días estuvo trabajando, algo que se acreditó porque él para entrar y salir de su trabajo debía marcar con huella digital”, explicó el letrado.
Agregó que “no hay constancia ni elemento de prueba para afirmar que la joven y su defendido se conocían, ni pruebas testimoniales ni telefónicas que acrediten, al menos, una vinculación entre Bazán y Villalba”; y que la llave “fue aportada por la madre en una audiencia en la que yo no estuve presente, el 30 de agosto, pero yo no pude ver si la llave abrió la puerta”.
Por otra parte, adelantó que solicitó a la fiscalía la intervención de un especialista en telecomunicaciones de la Universidad Tecnológica Nacional para que intervenga en las actuaciones y realice la apertura de todos los teléfonos utilizados en el predio Santa Catalina desde el 29 de julio hasta el 4 de agosto. “Esa petición es a los efectos de individualizar potenciales testigos y / o posibles partícipes”, dijo.
Rosas alegó además que si bien la fiscalía aseguraba que Bazán vendía estupefacientes y que consumía con menores, ya declararon alrededor de 30 personas entre empleados del municipio, guardaparques y transeúntes y que “todos aseguraron que no vieron gente en la casa de Bazán más que su mamá, sus amigos y su novia”.
En tanto, contó que Bazán había denunciado, tras la desaparición de Anahí, la presencia de un hombre encapuchado en la zona, al igual que lo hicieron varios vecinos más. Esta situación derivó en un sumario por parte de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense para investigar la supuesta mala actuación de los efectivos que habrían hecho caso omiso a esas denuncias.
“¿Por qué la policía no les dijo ese dato a las fiscales? ¿Por qué termina una división especial de Asuntos Internos averiguando esto cuando la misma policía tendría que haber sido la que reportó esto a la fiscal?”, se preguntó Rosas y agregó: “Asuntos Internos investigó esto en La Plata pero los ojos de la fiscal son la policía y la policía no lo reportó en el expediente penal, por eso yo les solicité a las fiscales que tomen copia del expediente de Asuntos Internos y que tomen declaración a los testigos que llamaron al 911 para denunciar ruidos extraños”.
“La policía tiende a trabajar de una manera tendenciosa y esto se ha instaurado desde hace años. Es un vicio de la fuerza. Cuando a la fuerza de seguridad le generan presiones para que dé respuestas o resultados no importa que sean tendenciosas. No buscan al responsable del hecho, buscan a alguien para tener un titular que diga `Hay un detenido en la causa`”, subrayó.
Luego de las detenciones del profesor y de Bazán, a pocos días de hallado el cuerpo, la fiscal Verónica Pérez tomó posición y declaró a la prensa: «Estoy totalmente convencida de que uno de los dos, o incluso ambos, son los responsables». Sin embargo, Agostino debió ser dejado en libertad a falta de pruebas. Es justamente por esta razón por la que Rosas cree que Bazán sigue imputado. “Si hoy se descubre que mi defendido no es responsable, es un papelón, es un escándalo judicial, hay que echar a toda la Policía y yo puedo pedir un jury de enjuiciamiento contra la fiscal porque sin elemento para imputarlo tomó posición, aún cuando la Ley del Ministerio Público Fiscal es clara respecto a que la fiscalía tiene que ser objetiva”.
“Bazán me demostró que es inocente, ajeno al hecho. Cuando él cae detenido se estaba buscando un autor del hecho y veníamos del papelón del maestro. Ahora por más que Villalba esté detenido con un ADN positivo, si lo tienen que soltar a Bazán se demuestra que el sistema judicial es inepto e incompetente a la hora de investigar y que la policía es tendenciosa y esto golpea al ministerio de Justicia de la provincia de Buenos Aires y al poder judicial, por eso creo que sigue implicado”, concluyó el letrado.
Entonces: hay indicios que conducen a la sospecha de una similitud entre el caso Anahí y el de la niña Candela Sol Rodríguez, de 11 años, secuestrada el lunes 22 de agosto de 2011 cerca de su casa en Hurlingham y hallada muerta el 31 de agosto de 2011; crimen sobre el cual acaban de conocerse las sentencias de los supuestos responsables, pese a que un detallado informe del Senado bonaerense, de 2012, comprobó el sistema de responsabilidades y complicidades existente entre policías, fiscales, jueces y elementos encumbrados del poder político.