De dólares claro. Pese a la quita lograda por el fallecido ex presidente Néstor Kirchner y otras decisiones de Estado adoptadas por su gobierno y durante los dos mandatos de Cristina Fernández de Kirchner tendientes al desendeudamiento, ese proceso de tenaza al cuello, que lleva décadas y condujo al país y al región a una sucesión de crisis económicas, sociales y políticas, nunca pudo ser superado. Con la llegada de Mauricio Macri a la Rosada la espiral del pasivo con el exterior se torna incontenible, pues deuda, fuga de capitales y concentración financiera y económica figuran en su agenda de gestión, con marcada relevancia.
La deuda externa bruta total del Estado nacional se ubicó en los u$s 284.800 millones al término del primer trimestre del corriente año, lo que representa un incremento de 21% respecto a los u$s 235.545 millones de igual período de 2016, informó hoy el Ministerio de Finanzas.
La cifra de cierre del primer trimestre de 2017 representa, además, una suba de 3,4% respecto de la deuda por 275.446 millones de dólares informada en el último trimestre del año pasado.La cartera que conduce Luis Caputo precisó que el monto total de 284.800 millones de dólares equivalen al 51,2% del Producto Bruto Interno (PBI) del país, una relación que se ubica por debajo del 54,2% verificado a finales del 2016, y del 53,5% registrado en 2015, cuando todavía no se había alcanzado un arreglo con los tenedores de bonos en «default».
Del total de deuda pública, la mitad corresponde a títulos públicos, préstamos, y anticipos otorgados o en cartera de Organismos del Sector Público Nacional.El 39,2% está en manos del sector privado, otro 9,9% lo tiene organismos bilaterales o multilaterales de crédito, y el 1,1% es deuda que no se presentó al canje y sigue pendiente de resolución.
La cartera de Finanzas precisó que el 68,1% de la deuda externa está emitida en moneda extranjera, por lo que el restante 31,9% es en moneda local.