La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos advirtió hoy que en los últimos meses, cientos de civiles murieron en la ciudad siria de Raqqa durante bombardeos de la coalición antiterrorista liderada por Estados Unidos.
Según la entidad con sede en Ginebra, esos ataques aéreos para aniquilar al Estado Islámico (EI), que ocupó la norteña localidad en 2013, aumentaron de manera drástica este mes, hasta llegar a mil 94, casi el doble de los reportados en julio (645). Así reporta este jueves la agencia Prensa Latina.
Si bien resulta difícil conocer con seguridad los detalles de estas acciones, hemos podido verificar algunos casos ocurridos desde el 1 de agosto, en cada uno de los cuales fueron asesinados más de 20 civiles, precisó en un comunicado.
De acuerdo con la Oficina, solo seis de los bombardeos contra Raqqa y sus alrededores provocaron la muerte de 151 personas inocentes.
Entre los casos citados están los bombardeos del 21 de agosto que impactaron las áreas residenciales de Al-Skhani y Al-Badu, donde fallecieron en total 53 civiles, incluyendo 17 mujeres y 10 niños.
La destrucción de un edificio de tres plantas en la propia Al-Badu había dejado un día antes a 27 seres humanos masacrados, siete de ellos menores de edad.
El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra´ad Al Hussein, afirmó hoy en una declaración que la lucha contra el terrorismo no puede ejecutarse a expensas de la vida de personas inocentes.
Zeid instó a todos los países que participan en la campaña antiterrorista en Siria, como Estados Unidos y Rusia, a garantizar la protección de los civiles.
El funcionario recordó que en Raqqa siguen atrapados unos 20 mil hombres, mujeres y niños, y muchos de ellos tratan de escapar de la ciudad dominada por el EI, grupo terrorista que utiliza escudos humanos y asesina a quienes intentan huir.