Tuvo lugar en La Habana un hecho sin antecedentes en términos de pensar a la Universidad Pública con destino social, solidario y de cooperación internacional. Fue el acto por la décimo tercera graduación de la ELAM, en La Habana. Ideado por el fallecido líder de la Revolución cubana Fidel Castro, el proyecto de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) ha graduado desde el 2005 a más de 28 mil 500 médicos de 103 países.
En el acto de cierre del curso 2016-2017, efectuado el pasado viernes en la sede de la ELAM, en La Habana, la doctora Maritza González, vicerrectora académica, explicó que en esta XIII graduación se titularon 742 jóvenes de 71 naciones, según cifras preliminares.
En presencia de los doctores Alfredo González y Jorge González, viceministro, y director nacional de docencia del Ministerio de Salud Pública, respectivamente, representantes del cuerpo diplomático acreditado en Cuba, e integrantes de la XXVIII Caravana de la Amistad Estados Unidos-Cuba, la vicerrectora académica destacó los resultados de este proyecto de integración por un mundo más humano, informó Cuba Debate desde La Habana.
La ELAM fue gestada en noviembre de 1999 y ha contribuido a elevar los indicadores sanitarios de diversos pueblos necesitados.
“Jóvenes graduados, hagan eco de las palabras del comandante Fidel Castro emitidas hace más de 17 años cuando expresó: ‘Habrán de regresar con tanta ciencia como conciencia’. Sean ustedes, unidos a los colegas de promociones anteriores, los protagonistas de esa gran obra, muestra de la solidaridad internacional que exhibe esta pequeña Isla”, remarcó la doctora Maritza González, vicerrectora académica.
Al referirse al entorno internacional que se caracteriza por extraordinarios desafíos en el orden político, económico y social, alertó sobre la situación de salud exasperada para muchos habitantes del planeta, donde la pobreza, el hambre, la inequidad, las crisis alimentaria, ambiental e hidroenergética se agudizan cada vez más.
Para revertir esta realidad, subrayó, es imprescindible fortalecer la unidad de nuestros pueblos, y la ELAM trabaja en la construcción de esa unidad por un mundo más humano, dijo.
En nombre de los graduados, la doctora Areej Saab Azmi Alkhawaga, de Palestina, expresó: “Ustedes profesores y trabajadores fueron la familia en este largo camino, nos formamos como médicos para Cuba y el mundo, como señalara Fidel. Llegó la hora de la partida, pero siempre llevaremos a Cuba en nuestros corazones, en la ciencia y la conciencia, en donde quiera que estemos, gracias Cuba por el apoyo a nuestros países, en especial a mi querida Palestina, gracias ELAM”, remarcó la recién graduada visiblemente emocionada.
Mientras, Saeb Azmi, en nombre de los padres de la nueva hornada agradeció la formación de su hija y el apoyo de Cuba a la causa justa de Palestina y subrayó que los graduados tienen responsabilidades humanas y el compromiso con sus países para salvar vidas.