Alumnos y docentes realizan una “permanencia pacífica” en el edificio donde funciona la casa de estudios. Las Madres de Plaza de Mayo fueron notificadas de la intervención del IUNMa mientras mantenían un encuentro con autoridades de universidades nacionales, entre ellas la decana de la Facultad de Periodismo de la UNLP, Florencia Saintout.
Con una toma del 5° piso del edificio ubicado en 25 de Mayo 544, de la Ciudad de Buenos Aires, la comunidad educativa del Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo (IUNMa) rechaza el desplazamiento del rector Germán Ibañez y resiste la entrada del interventor Javier Buján, designado por el gobierno de Mauricio Macri.
La titular de Madres, Hebe de Bonafini, felicitó hoy “a los estudiantes que tomaron en sus manos la defensa de la Universidad” y pidió “a toda la población que acompañe la lucha” sumándose a la “permanencia pacífica” en las puertas de la casa de estudio.
“Alguna vez les dije que ahora ustedes tienen que ser nuestras piernas y nuestras más, porque nosotras sólo podemos poner la cabeza. Les estoy pidiendo piernas, manos y cuerpo. No estamos defendiendo más que la Universidad de las Madres, que se llama siempre Universidad Popular por más que le cambien el nombre. Si nos vencen a nosotros, van a vencer a las demás universidades populares que tenemos en el conurbano y en todo el país. A defender la educación”, subrayó.
Las Madres fueron notificadas de la intervención del IUNMa anoche, mientras se reunían con la decana de la Facultad de Periodismo de la UNLP, Florencia Saintout, y otras autoridades de universidades nacionales para definir estrategias en defensa de la educación pública.
En la notificación, firmada por los ministros de Justicia y de Educación, Germán Garavano y Esteba Bullrich, se oficializa que “a partir del 14 de junio” Buján reemplazará a Ibañez.
Buján, un hombre ligado al presidente de Boca, Daniel Angelici, “viene de una intervención desastrosa en el INADI y antes estuvo con los controladores de tránsito de la ciudad, haciendo negocios para él y los suyos, con despidos y persecuciones”, señaló Martin Forcciniti, uno de los docentes del IUNMa que participa de la toma.
“La intervención es la última de una serie de ataques a la Universidad de las Madres”, dijo Forcciniti y recordó que los profesores llevan diecisiete meses sin cobrar: “Nosotros llevamos esta lucha con todo el compromiso y la fuerza porque no vamos a abandonar este proyecto de ninguna manera. Más allá de lo terrible de la situación, vamos a seguir resistiendo y defendiendo el derecho a la educación y al trabajo, como lo venimos haciendo desde diciembre de 2015”.
Por su parte, la presidenta del Centro de Estudiantes, Belén Sarubbi, confirmó que mantendrán la toma “hasta tanto se dé marcha atrás con la medida”.
“No hay fundamentación para la intervención”, sostuvo Sarubbi y denunció un “vaciamiento” del IUNMa desde la llegada del gobierno de Cambiemos: “Hace un año y medio que no tenemos edificio, no firmaron nunca la contratación de los docentes y hubo un recorte presupuestario del 75 por ciento”.