En las últimas horas su destino fue Pilar. En el municipio que comanda el cambista Nicolás Ducoté desembarcó Juliana Awada, acompañada de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y mostró el perfil social que le diseña la estrategia electoral del PRO- “Agradezco la presencia de la Primera Dama por la visita al municipio “y la calidez con la que trató a nuestros vecinos”, dijo Ducoté en la cooperativa San Cayetano de Lagomarsino, donde funciona el programa “Argentina Trabaja”. La historia date de antes pero el 20 de enero de 2016, a un mes y algo de encaramarse con su marido en la Rosada, un costurero ingresaba con cámara oculta a un taller clandestino con cama adentro donde 13 personas eran sometidas a la servidumbre y el hacinamiento. El taller clandestino, ubicado en el barrio de Mataderos hace tres años que trabaja exclusivamente para la firma Cheeky que actualmente Juliana Awada.
Los costureros estaban encerrados y para ir a hacer un simple mandado a la calle y traspasar la puerta de hierro, debían dejar siempre sus pertenencias como garantía de que no se escaparán. El propio costurero que hizo la cámara oculta, tuvo que dejar su bolso para poder salir con la excusa de buscar una farmacia. Los costureros están hacinados en cuartos muy pequeños con cama cuchetas. Y en esas mismas camas cuchetas deben comer, ya que carecen de mesas y sillas como puede verse claramente en la cámara oculta. Los niños de varios de esos costureros también están sometidos al encierro. Todos comparten un baño muy precario.
Cheeky ya había sido denunciada penalmente por el Gobierno de la Ciudad en el período de Jorge Telerman, la Defensoría del Pueblo y la Alameda en enero de 2007. En aquella oportunidad, se habían logrado inspeccionar varios talleres con costureros sometidos a la servidumbre. Lamentablemente un escandaloso fallo del ex Juez Federal Guillermo Montenegro, despues ministro de Seguridad de Mauricio Macri en la Ciudad, sobreseyó a la firma que por la ley de trabajo a domicilio es solidariamente responsable de los talleres donde manda a confeccionar sus prendas.
Otros talleres de Juliana Awada ya habían sido filmados y denunciados por la Alameda en setiembre de 2006 y en marzo de 2010. A pesar de los testigos y las inapelables imágenes de las cámaras ocultas, también la justicia hizo la vista gorda con estas denuncias.
Ni las inspecciones del GCBA en época de Telerman, ni las denuncias de la Defensoría, ni los videoinformes y denuncias de la Alameda alcanzaron para que la justicia castigue la impunidad de Daniel y Juliana Awada que siguieron todos estos años maximizando ganancias en base a la explotación más abyecta de costureros migrantes en talleres clandestinos con trabajo esclavo.
Aprovechando los empujones que le da la prensa, la Primera Dama ya camina el Conurbano. Aunque en distintas oportunidades negaron su posible candidatura, Cambiemos le diseña un perfil social y busca apuntalarse en territorio hostil de la mano de la Evita PRO.
En las últimas horas su destino fue Pilar. En el municipio que comanda el cambista Nicolás Ducoté desembarcó Juliana Awada, acompañada de la ministra de Desarroll Social Carolina Stanley y mostró el perfil social que le diseña la estrategia electoral del PRO a la Primera Dama.
“Agradezco la presencia de la Primera Dama, Juliana Awada, por la visita al municipio “y la calidez con la que trató a nuestros vecinos”, dijo Ducoté en la cooperativa San Cayetano de Lagomarsino donde funciona el programa Inclusión Social con Trabajo “Argentina Trabaja”, donde desembarcaron Awada y Stanley.
Las mujeres PRO recorrieron el taller de la cooperativa San Cayetano que ocupa 10 mujeres y tres hombres. Allí se dedican a la fabricación de muebles, los cuales una parte están destinados a la venta y otra a equipar escuelas y otros edificios de bien público.
La llegada de Awada a Pilar reaviva las posibilidades de que la Primera Dama tome un rol importante de cara a las trascendentes elecciones legislativas de este año. Aunque en Cambiemos lo negaron sistemáticamente, ya le diseñaron un perfil social para transformarla en una especie de Evita PRO.
Para entrenarse acompaña a la ministra de Desarrollo Social en sus recorridas y trata de ganar experiencia para cuando le toque mostrarse en agenda proselitista.
El factor clave que apuntala a Awada es el constante guiño favorable de los medios “amigos” que la convierten en tapa de revistas del corazón casi todas las semanas.
Un comentario
graciela
ahhhh, quieren volver a colonizar a los indio??? que se queden en las privadas y en las publicas paguen le bien a los maestros!!! que los indios, nos acomodamos como los melones!!!