La gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, denunció un «ataque planificado» a la residencia oficial local por parte de un grupo de manifestantes y advirtió que «quieren mi cabeza» para la campaña electoral. En tanto docentes, estatales y judiciales reivindicaron la protesta de los trabajadores y alertaron sobre fuerte represión.
En declaraciones a Radio 10, recogidas por el diario Ambito Financiero, la ex ministra de Desarrollo Social rechazó que haya habido «represión» durante la manifestación que, según precisó, se desarrolló desde las 21 hasta las 3 de esta madrugada.
«Jamás voy a ejercer la represión. Lo que se ha hecho es un ataque y querían entrar a la vivienda. Hacer una marcha, cortar una calle, todo está bien, pero querer entrar a una casa es una barbaridad. Rompieron vidrios y puertas, el cordón de la vereda, rompieron el nicho de gas», subrayó la referente del Frente para la Victoria, quien precisó que «hubo dos personas que fueron atendidas en el hospital».
En ese sentido, insistió en que «querer entrar a la fuerza en una casa ya forma parte de un ataque planificado».
«Quizás recibieron instrucciones de Durán Barba y quieren mi cabeza para la campaña electoral. Qué bueno sería para Durán Barba afirmar ´Alicia Kirchner se tuvo que ir de Santa Cruz´ para la campaña nacional del oficialismo”, planteó, al tiempo que se quejó por ser víctima de una presunta «persecución política».
Asimismo, Alicia Kirchner reclamó al Gobierno nacional que le apruebe la posibilidad de emitir deuda por 350 millones de dólares y así sortear la situación provincial, a la que definió como «en estado crítico».
«Tengo un déficit de 6.713 millones de pesos. Esta situación la conoce el Gobierno nacional. Yo necesito ayuda, es más estoy con el trámite de un bono que espero que pueda salir en 50 días. Vamos a salir, pero también necesito el apoyo de la Nación. Casi todas las provincias pudieron endeudarse, yo todavía no», se quejó Alicia Kirchner.
Y finalizó: «Cómo no voy a estar desesperada o preocupada, porque realmente siento la necesidad de la gente, no es que no la siento. Me coloco al lado de mi pueblo».
Al menos, tres personas resultaron heridas por la represión policial, informaban desde el gremio docente Adosac, Ate y Judiciales de la provincia de Santa Cruz, en conferencia de prensa. “Se trata del periodista Jorge Riquelme, del enfermero que fue a asistirlo. Ambos recibieron balazos de goma en diferentes partes del cuerpo. Y hay otro reportero gráfico que sufrió la inhalación de gas lacrimógeno y debió ser atendido”, afirmaron.