La mujer se venía contradiciendo, hasta que fue advertida y contó todo. Dijo que la acusación al principal imputado fue una maniobra policial en la que ella fue obligada a participar. Y que se hizo con anuencia del fiscal. Dio nombres y detalles. Ahora el tribunal evalúa si el juicio sigue. Puso sobre el tapete y confirmó lo expuesto en 2012 por el llamado Informe del Caso Candela de una comisión investigadora del Senado bonaerense, pieza clave para desentrañar la trama de complicidades entre el el delito, el crimen organizado en particular, y fiscales, jueces, policías, funcionarios y dirigentes del campo político, trama esa que lleva años de blindaje, que persiste, y que poco y nada se ha hecho desde el Estado para desactivarla, pues
Su muerte aun permanece en las sombras de la impunidad y la complicidad del Estado.
Una testigo del caso Candela confirma las complicidades de policías, fiscales, jueces y el poder político con el crimen organizado
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