Tres efectivos de civil armados lo apresaron ilegalmente en la estación Lima y los pasajeros intercedieron al grito de que lo soltaran. “Está todos los días acá, lo vemos siempre”, le decían a los policías. Sin embargo, estos pidieron refuerzos y se llevaron al vendedor.
La violencia institucional escala en la Ciudad de Buenos Aires. Días atrás la Policía porteña se llevó detenida a una militante de La Garganta Poderosa por filmar a varios efectivos sin identificación que retenían en un patrullero a un niño de 13 años. Ahora la fuerza del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, arremetió contra un joven trabajador que vendía pañuelos de papel en la Línea A del Subte.
El nuevo caso de abuso policial ocurrió esta mañana en la estación Lima. Tres efectivos de civil armados le pidieron identificación al vendedor y, pese a que este le entregó el DNI, lo retuvieron brutalmente contra la pared para esposarlo y llevárselo detenido sin razón alguna.
Un grupo de pasajeros intercedió por el joven, pidiendo que lo liberaran, que no estaba cometiendo ningún delito. “Escuchame, está todos los días acá, lo vemos siempre”, le dijo una mujer a la policía. Sin embargo, los efectivos se negaron a soltarlo, acusando al vendedor de “uso indebido del espacio público”.
Ante la protesta de los pasajeros, que gritaban que lo soltaran y denunciaban a los policías de coimeros, uno de los efectivos de civil pidió refuerzos y pronto llegaron tres uniformados para terminar de detener de manera ilegal al trabajador.
Christian Gruenberg, director del Programa de Violencia Institucional de la Defensoría General de la Ciudad, advirtió al diario Página/12 que esta situación de abuso policial se está registrando cada vez más seguido.
“El armado es el mismo, siempre: ¿cómo es que un vendedor ambulante termina contra la pared esposado? A él le tendrían que haber labrado un acta, pedirle una identificación –que de hecho, en el video se ve claramente que la policía la tiene en sus manos-, y dejarlo ir. Pero lo que hace la policía es aplicarle el delito de resistencia a la autoridad, con lo que justifican la detención”, sostuvo y dejó un teléfono (0800-33-336-337) para denunciar este tipo de atropellos.