En una nueva movilización, los 380 cesanteados de AGR-Clarín pidieron ser recibidos en el Ministerio de Trabajo pero el titular de la cartera les dio vuelta la cara. También se refirieron a los anuncios de la CGT y plantearon la necesidad de “un paro ahora contra los despidos y el ajuste”.
A casi tres semanas de los despidos ilegales en la planta de Pompeya de AGR-Clarín, los obreros gráficos y sus familiares volvieron a marchar, esta vez desde Plaza de Mayo a la sede del Ministerio de Trabajo, ubicada en la calles Callo y Mitre, de Capital Federal.
Acompañados por distintas organizaciones, los 380 cesanteados reclamaron una reunión con el titular de la cartera laboral, Jorge Triaca, quien se negó a recibirlos con el pretexto de que no era un encuentro previsto.
“Queremos que AGR reabra, pero no con trabajadores flexibilizados, sino con los trabajadores que tenemos nuestra antigüedad, nuestro convenio colectivo y nuestra organización gremial”, dijo uno de los delegados de la Federación Gráfica Bonaerense y denunció que “Triaca permite que Clarín haga lo que se le viene en gana”.
“Ellos estarán blindados con la complicidad del Gobierno y del poder económico, pero nosotros tenemos el blindaje del enorme apoyo obrero y popular, y eso es lo que nos da fuerza para seguir esta lucha hasta el final”, agregó el trabajador.
Si bien Triaca les dio vuelta la cara, una enorme cantidad de empleados de la cartera de Trabajo salieron a la calle a solidarizarse con los gráficos despedidos por el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto.
Los trabajadores también se refirieron al anuncio de la CGT de una movilización para el 7 de marzo y una posible medida de fuerza para fines de ese mes: “Necesitamos un paro ahora contra los despidos y el ajuste”, subrayaron.