Los 250 trabajadores que quedaron en la calle tomaron la fábrica de computadoras de Vicente López y se movilizaron a la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación. La decisión del Gobierno nacional de eliminar el arancel para las importaciones seguirá haciendo estragos.
Banghó, controlada por la empresa PC Arts Argentina, echó a buena parte de los trabajadores de su planta de Vicente López y pretende pagar sólo el 50 por ciento de las indemnizaciones. En total son unos 250 los despidos, de un total de 650.
Frente a la inacción de las autoridades provinciales y nacionales, los trabajadores afectados decidieron ayer tomar la fábrica y este miércoles se movilizaron al Ministerio de Trabajo de la Nación, en reclamo de intervención.
Sin embargo, como ocurre en otros conflictos similares, como el de AGR-Clarín, la indiferencia del titular de la cartera laboral, Jorge Triaca, se corresponde con un plan sistemático de despidos.
La decisión del presidente Mauricio Macri de eliminar el arancel del 35% a las computadoras y tablets importadas, ya se cobró unos 2.000 empleos en 2016 y este año puede ser aún peor.
“Lo que está en juego son más de 10 mil puestos de trabajo porque la electrónica en nuestro país genera esa cantidad de empleo. Lo de Banghó sólo es el inicio”, advirtió el diputado nacional del FpV y dirigente de la UOM, Abel Furlán.
El conflicto comenzó el pasado viernes 20, cuando Banghó comenzó a enviar los telegramas cuando los empleados se encontraban de vacaciones y trasladó las máquinas de ensamblaje al establecimiento que tiene en Parque Patricios, donde seguirían produciendo las netbook para el Ministerio de Educación y cubrir el mercado local con importación.
Por la quita de aranceles, ya cerraron tres empresas de informática en la Capital Federal y la fueguina IFSA, del grupo BGH, mientras que en el grueso del sector metalúrgico se registraron más de 10 mil despidos y unas 14 mil suspensiones.
