El video se llama Don Vigi. Circula por las redes sociales, está localizado en https://www.youtube.com/watch?v=9nDiORx21RE y su letra y música impactan por su contenido justificador del delito sistémico y de la violencia con los que la instituciones policiales y de seguridad, federales, provinciales y ahora municipales agreden al conjunto de la sociedad, especialmente a los pobres, a los jóvenes, a las mujeres y a los colectivos que el fascismo califica de distintos.
“Somos humanos, también nos gusta cantar”, dice una de las frases de “La cumbia policial”. Los mismos que persiguen a los artistas callejeros y con total impunidad atacan diariamente a la juventud, buscan lavarse la cara utilizando un estilo popular, característico de los barrios populares, donde hay un caso de gatillo fácil cada 25 horas.
Avalados por la política de “mano dura” y represión del gobierno nacional y de las administraciones provinciales en general, parte constitutiva de la estrategia Cambiemos, alardean con estrofas como “te haces el polenta y no podes arrancar, porque con nosotros te querés matar”, o “por la vereda del frente caminas, (…) después adentro lloras”.
“Cabe destacar que quienes son cómplices innatos de la trata de personas, narcotráfico y desarmaderos, fueron beneficiados por el macrismo, con aumento de sueldos que rondan el doble que el de un docente”, recuerda con La Izquierda Diario.
“Buscate un laburo”, dicen en el tema quienes se encargaron de reprimir a todos los trabajadores que defienden sus salarios y puestos de trabajo, y en un contexto social donde la mitad de los trabajadores malviven con no más de ocho mil pesos por mes, cerca del 35 por ciento se encuentra en la informalidad y otro porcentaje sufre indignas condiciones de pobreza sistémica.
Dentro de poco se cumplirán ocho años del asesinato en manos de la Bonaerense del joven Luciano Arruga, por haberse negado a robar para esa policía en Lomas del Mirador. Gobernaba la provincia de Buenos Aires Daniel Scioli, quien se encargo de invisibilizar el informe que el Senado provincial labró sobre el sonado caso Candela y en el cual se da cuenta de la red de complicidades de la policía con el delito en sus más variadas modalidades.
Esa es la policía asesina y cumbianchera que padecen los argentinos. La dirigencia política es cómplice.