A 40 años de la apropiación a precio vil y bajo tortura de la única productora de papel para diarios del país, se realizó en el barrio de Constitución un masivo acto para exigir juicio y castigo a los civiles de la dictadura, entre ellos Héctor Magnetto, Ernestina Herrera de Noble y Bartolomé Mitre.
Frente a Clarín, en la esquina de Tacuarí y Finochietto, víctimas de la dictadura cívico militar, organismos de derechos humanos, gremios y partidos políticos reclamaron “Memoria, Verdad y Justicia” a 40 años de la apropiación ilegal de Papel Prensa.
David Graiver, fundador de esa productora de papel para diarios, murió en agosto de 1976 en un accidente aéreo ocurrido en México y las acciones de la empresa pasaron a sus familiares. De acuerdo a la investigación del fiscal Gómez Barbella, dos meses después la viuda de Graiver, Lidia Papaleo, los padres y el hermano, y su socio, Rafael Ianover, fueron “intimidados” a transferir las acciones a Fapel S.A., sociedad integrada por Clarín, La Nación y La Razón. Esto sucedió el 2 de noviembre en las oficinas que La Nación tenía en la calle Florida, donde estuvieron Héctor Magnetto, Bartolomé Mitre, Patricio Peralta Ramos (entonces director de La Razón) y el abogado Bernardo Sofovich, en representación de Ernestina Herrera de Noble.
Más tarde, entre marzo y abril de 1977, todos los integrantes del grupo Graiver, incluidos Lidia y su hermano, Osvaldo Papaleo, serían secuestrados y trasladados a Puesto Vasco, uno de los centros clandestinos de detención a cargo de los genocidas Ramón Camps y Miguel Etchecolatz.
En varias oportunidades, la viuda de Graiver dijo recordar “claramente los rostros de quienes me torturaron”, pero “nunca olvidaré la cara del señor Magnetto, y su mirada, que me daba más miedo que quienes me custodiaban (…) Él me amenazaba directamente con la muerte de mi hija”.
Hoy, los hermanos Papaleo junto a Ianover, de 91 años, participaron del masivo acto en el barrio porteño de Constitución para recordar este “robo del siglo” y exigir “que se termine la impunidad” de Clarín y La Nación, a los que calificaron como “ladrones de lesa humanidad”.
“Esto fue un despojo vergonzoso, porque frente al valor que tenía el paquete accionario privado de Papel Prensa, que le pertenecía a David Graiver, pagaron un precio vil. Pagaron 8.300.000 dólares, mientras que la máquina principal que tenía la empresa, importada de Finlandia, costó en esa época 6.000.000 de dólares”, comparó Ianover al tomar la palabra.
El ex vicepresidente de la empresa recordó que “fueron 23 los detenidos injustamente con el agravante de la tremenda tortura que le infringieron a la señora Lidia Papaleo, además del fallecimiento de uno de los integrantes del grupo (Jorge Rubinstein), que murió en la mesa de tortura cuando la aplicaban la picana eléctrica”.
Magnetto, Herrera de Noble y Mitre son “partícipes del delito de lesa humanidad y les corresponde una pena que la justicia tendrá que determinar”.
La causa está hace cinco años a cargo del juez federal Julián Ercolini, quien la mantiene congelada, evitando llamar a indagatoria a los principales imputados, entre ellos los directivos de Clarín y La Nación.
En un documento leído hacia el final del acto en Constitución, los integrantes de HIJOS advirtieron que “los empresarios que dieron el Golpe de Estado con genocidas como Jorge Rafael Videla, Emilio Eduardo Massera y Orlando Ramón Agosti fueron parte del plan económico criminal de Martínez de Hoz: son los Macri, los Pérez Companc, los Magnetto y tantos otros”.
“Los grupos vinculados a la prensa, además de órganos de propaganda de la mentira y el terror, fueron los que influyeron en el derecho a la comunicación de millones de generación, los que escribieron el decreto ley de Radiodifusión con Videla, y son los mismos que hoy vulneran el derecho a la comunicación con Macri, a partir de las modificaciones de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual”, manifestaron y agregaron que “con Papel Prensa se controla gran parte de nuestra democracia”.