El pueblo se manifestó en las adyacencias del Palacio de Miraflores, en Caracas, para rechazar las maniobras desestabilizadoras de la derecha a través de la Asamblea Nacional. “Ha recibido órdenes del imperio para acabar con la revolución como sea, pero no se lo vamos a permitir”, exclamó el mandatario.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, recibió hoy a una multitud que se manifestó hasta la sede del Gobierno nacional para decir “basta de odio, intolerancia, golpismo y conspiración” de la derecha.
“En Venezuela no habrá golpe ni intervención extranjera”, dijo Maduro y agregó que “la derecha está desesperada y ha recibido órdenes del imperio para acabar con la revolución como sea, pero no se lo vamos a permitir”.
El mandatario reiteró que su gobierno apuesta por el diálogo con todos los sectores políticos del país para lograr la paz en Venezuela y superar los problemas económicos.
“Yo llamo al respeto y a la convivencia, así como llamo a la lucha y al combate, aquellos que quieren llevarnos a la desestabilización no han podido ni podrán”, sostuvo frente a la multitud que se concentró en el Palacio Miraflores en defensa del orden democrático.
Hacia el final de su discurso, Maduro llamó a la movilización permanente del pueblo para enfrentar las maniobras golpistas desde la Asamblea Nacional (AN), que “lamentablemente ha tomado el camino del desacato” a la Constitución.
De esta forma se refirió al acuerdo de los parlamentarios de la derecha, que pretende iniciar un “juicio político” en su contra.
La oposición venezolana también convocó a una huelga general de 12 horas el próximo viernes en todo el país, y a una marcha hacia Miraflores el 3 de noviembre, según anunció el secretario ejecutivo de la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba.