El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glass, confirmó este domingo que la cifra de muertos por el terremoto de magnitud 7,8 grados en la escala de Richter, que ocurrió en la noche del sábado, ha dejado hasta ahora 77 muertos y 588 heridos, aunque «inevitablemente la cifra puede aumentar».
En una última declaración a la prensa ofrecida en la mañana, Glas detalló que han empezado a repartir 3 mil kits de alimentos y ayudas a los afectados. Informó que su persona junto con todo el personal de rescate realizará un recorrido por Manabí en el suroeste del país y las zonas afectadas por el potente temblor.
Reportó que comienza a restablecerse el servicio de energía de forma parcial en las zonas afectadas y que están trabajando en los lugares donde no ha llegado la electricidad.
«Levantamos postes y redes eléctricas para que permita recuperar la manera más pronta el servicio de electricidad, se están instalando estaciones móviles en Pedernales para garantizar la cobertura», dijo.
Asimismo, recordó que las operadoras móviles han abierto de manera gratuita el envió de mensajes para colaborar con la emergencia.
Ratificó que no se presentan daños en las represas que controlan recursos hidrícos ni tampoco en oleoductos. No obstante, declaró que si hay algunas vías que han resultado afectadas, sobre todo en Manabi y Pedernales.
Por otro lado, Glas comentó que está coordinando la ayuda internacional enviada desde Venezuela y México. «Acabamos de recibir llamadas de países hermanos dispuestos a este momento», indicó.
Hasta ahora se han reportado más de 55 réplicas desde que ocurrió terremoto de 7,8.
Las autoridades han desplegado por todo el país unos 14 mil funcionarios, entre efectivos de las Fuerzas Armadas, rescatistas, bomberos y médicos, para atender la emergencia nacional. El terremoto de 7,8 ha dejado 77 muertos y 588 heridos en Ecuador
El presidente Rafael Correa firmó un decreto de emergencia que comprende la disposición de 600 millones de dólares para atender a las víctimas e iniciar la reconstrucción, luego de que el potente sismo haya acabado con grandes infraestructuras.
La provincia más afectada es Manabí, especialmente las comunidades de Pedernales y Portoviejo. “El nivel de afectación es importante y tenemos dificultades para llegar al sitio del desastre, tenemos que calificarlo de esa manera”, expresó el vicepresidente de la nación, Jorge Glas.
El mandatario ecuatoriano pidió desde Roma, Italia que el país se una en este momento de emergencia que enfrenta Ecuador y llamó a la calma. «Este momento a unirse país, para atender de mejor manera la emergencia», precisó Correa vía llamada telefónica con el canal público Ecuador TV.
El jefe de Estado ya se encuentra de regreso al país para atender personalmente la catástrofe y confirmó la firma del decreto de Estado de excepción para el territorio nacional y la activación de líneas de crédito multilaterales.
Agregó que lo más importante es salvaguardar las vidas humanas y que siguen evaluando el daño en infraestructura de las zonas más afectadas como la ciudad de Portoviejo y el cantón Pedernales, ubicados en Manabí.
De igual modo, envió un mensaje de solidaridad y condolencias a los familiares de las personas fallecidas, que por la magnitud del sismo podrían ser más”, advirtió el dignatario.
«Nuestra total solidaridad, infinito amor a las familias de los fallecidos, nuestro acompañamiento a los heridos», dijo.
Desde el vuelo de regreso se analizará donde aterrizará el avión presidencial si en Manabí, Guayaquil y Esmeraldas para supervisar las zonas afectadas, informó Andes.