El ministro de Producción, Francisco Cabrera, utilizó el eufemismo de «normalización de la economía» para confirmar un «reacomodamiento de tarifas» en el primer semestre, en momento en que trascendió que el Gobierno nacional anunciará subas de hasta el 500 por ciento en el servicio de agua, de 300 por ciento en el gas y de entre 150 y 70 por ciento en el transporte.
Al exponer durante una jornada del Banco Interamericano en el Hotel Hyatt, Cabrera prometió que tras este megatarifazo «entre agosto y septiembre finalizará el proceso de normalización económica» que lleva adelante el Gobierno y destacó que a partir de entonces «comenzará a bajar la inflación».
Según Cabrera, los aumentos exhorbitantes sólo tendrán incidencia en la inflación durante el primer mes porque esas subas «no están vinculadas a los precios relativos».
Según estima el gobierno, los aumentos empezarán el lunes 4 de abril, debido a las quitas de subsidios en los servicios de agua y gas, y el aumento de los boletos del subte y las líneas de colectivo.
A raíz del cobro del costo del gas importado, los incrementos en las tarifas serían diferenciales, dado que existen medidas cautelares dictadas por magistrado en el interior del país que impiden el ajuste tarifario y la percepción de ese cargo. No obstante, según números estimados por las distribuidoras, el ajuste promedio rondará el 300 por ciento.
En el caso del transporte, las autoridades habrían definido un incremento del boleto mínimo para el servicio de colectivos del área metropolitana de 3 hasta un mínimo de 5 pesos, aunque las empresas intentarían que la suba llegue a los 6 pesos, lo que implica un aumento superior al 70%.