Luego de varios cuartos intermedios, el gobierno de Mauricio Macri y los cinco gremios docentes de alcance nacional –CTERA, UDA, CEA, SADOP y AMET- lograron un acuerdo en la paritaria que deberá ser refrendado por las bases de cada sindicato.
De esta forma, el salario inicial de referencia será de 7.800 pesos a partir de febrero y de 8.500 pesos desde julio. Esto incluye un aumento del Fondo de Incentivo Docente que la Nación le transfiere a las provincias, que pasa de 400 pesos a 910 en febrero y a 1200 en julio.
El foco está puesto ahora sobre el mayor distrito del país, la provincia de Buenos Aires, donde la gobernadora María Eugenia Vidal había ofertado un magro 24,1 por ciento cuando los gremios reclamaban un 40%.
A última hora de este jueves, tras la paritaria nacional, Vidal propuso un 34,6 por ciento en tres tramos, lo que llevaría el salario inicial a 7.900 pesos en febrero, 8.850 en marzo y 9.800 en julio. Los gremios quedaron en dar una respuesta antes del sábado.
En tanto, en Santa Fe los docentes ya convocaron a un paro de 48 horas a partir del lunes al rechazar un aumento del 30,5 por ciento, desdoblado en marzo y julio, más una suma fija de 1.000 pesos en febrero.
“Hasta el domingo a la medianoche tenemos tiempo, vamos a hacer lo posible para rever la situación”, dijo el ministro de Educación de la Nación, Esteban Bullrich, al referirse al conflicto en esa provincia litoraleña.
Según precisó UDA, tampoco está garantizado el inicio de las clases en Mendoza, Río Negro, Córdoba, Santa Cruz y Tierra del Fuego.