Las provocaciones del macrismo no tienen límite. Mientras crece el repudio de los organismos de derechos humanos por la visita de Barack Obama a la Argentina, en coincidencia con el 40 aniversario del Golpe de Estado de 1976, desde el Gobierno nacional anunciaron que piensan en una visita del mandatario estadounidense a la ex ESMA el próximo 24 de marzo.
“No está cerrada la agenda del presidente Obama, lo estamos hablando con la embajada de Estados Unidos, pero no me extrañaría que esa visita exista”, señaló hoy el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj.
Para el funcionario, que Obama participe junto a Mauricio Macri del aniversario en el ex centro clandestino de detención, sería “un reconocimiento” y “un homenaje a las víctimas” de la dictadura. “Es una excelente idea, porque es indiscutible su compromiso con los derechos humanos”, agregó.
La titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, dijo ayer que “Macri lo invitó el 24 de marzo para no dejarnos hacer la marcha” y convocó a llenar la Plaza “cueste lo que cueste”.
En tanto, desde Madres Línea Fundadora, Nora Cortiñas calificó como “terrible y sádico” que Obama esté durante el Día de la Memoria en Argentina como representante de un país que gestó las dictaduras en el Cono Sur y que ahora “vive entrometiéndose en otros países, provocando el horror”.
“No creo que sea un encuentro feliz; creo que puede haber problemas y es innecesario”, sostuvo por su parte Adolfo Pérez Esquivel, quien adelantó que le pedirá formalmente al presidente norteamericano que retrase su viaje hasta el 25 de marzo.
El Premio Nobel de la Paz también apuntó contra Macri y planteó su preocupación “por las tensiones que se puedan generar con un gobierno que quiere desandar todo el camino realizado por las organizaciones de derechos humanos”.