El presidente Mauricio Macri modificó a través de un nuevo decreto el Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, que implentaba políticas de vanguardia en materia de derechos y que apuntaba a brindar cobertura a los más desfavorecidos.
El nuevo Decreto 114/2016 publicado el pasado 12 de enero en el Boletín Oficial da de baja las funciones del programa, que había sido creado por ley en el año 2002, luego de años de lucha de organizaciones que defienden los derechos de las mujeres y minorías sexuales.
En la edición de Página/12 de hoy, la secretaria de Género de la CTA e integrante del consejo consultivo del Programa, Estela Díaz, sostuvo que con este nuevo decreto “peligran la continuidad de suministro de insumos como métodos anticonceptivos, las capacitaciones que se venían llevando adelante y la formación de equipos de salud”.
Entre los objetivos del programa se encontraban alcanzar para la población el nivel más elevado de salud sexual y reproductiva, disminuir la morbimortalidad materno-infantil, prevenir embarazos no deseados, promover la salud sexual de la población adolescente, garantizar el acceso a la información y prestaciones de servicios referidos a la salud sexual y procreación responsable, entre otras cuestiones.
Según fuentes que consultaron al Gobierno, desde la administración macrista negaron que el programa vaya a desaparecer, pero la norma está publicada en el Boletín Oficial y no hay a la vista ningún nuevo decreto que vuelva atrás con la iniciativa.
A su vez, según constata Página/12, en los días previos a la aparición del decreto los trabajadores del programa recibieron la orden de las nuevas autoridades del Ministerio de Salud, encabezado por Jorge Lemus, de suspender todas las actividades que venían desarrollando.