Por Ariel Spini / En once días de presidencia, Mauricio Macri decidió la apertura indiscriminada de importaciones y liberó el valor del dólar, con una devaluación superior al 40 por ciento. Son medidas que benefician a los grupos concentrados de poder y que atentan contra los puestos de trabajo nacionales.
“Prácticamente van a abrir el mercado y si van a abrir el mercado sabemos lo que ocurre con los trabajadores”, sostuvo el secretario general de UPCN en la provincia de Buenos Aires, Carlos Quintana, y comparó la situación con el menemismo: “Cuando uno se quema con leche ve una vaca y llora. La década del ‘90 nos ha dejado el resultado de la sustitución de productos de manufactura extranjera con valores muy bajos y eso ha significado el cierre de muchas empresas y aumento del desempleo”.
En este sentido, destacó que las medidas del ingeniero “nos traen inquietudes sobre cómo se va a comportar el mercado interno”.
En cuanto a las negociaciones salariales, Quintana dijo que será difícil avanzar sin conocer la inflación: “Nos convocan a paritarias, pero qué paritarias vamos a discutir nosotros si todavía no sabemos cuáles son los índices de diciembre que le han pegado un aumento a todo lo que es la canasta básica”.
“Anticipar las paritarias es una locura. Lo que vamos a plantear es discutir algo en enero y discutir la paritaria organizada a fines de febrero con precisiones del comportamiento del mercado”, adelantó el sindicalista.