En una entrevista que concedió al canal de televisión italiana Rai Uno, el presidente Al-Assad aseguró a los sirios entienden bien los sentimientos de los franceses, como han entendido el sentimiento de los libaneses en el último atentado que sacudió el Líbano hace pocos días y el sentimiento de los rusos por el siniestro del avión ruso sobre el Sinaí.
En su respuesta sobre la fuerza del EI o Daesh, quién está detrás de este crimen, el presidente al-Assad dijo que Daesh hasta el momento no goza de este apoyo dentro de Siria, y esto es una señal buena, pero si no se acaba con este problema crónico podría afectar en la sociedad.
El presidente explicó que algunos terroristas recibieron su entrenamiento en Siria a través del apoyo de los turcos, los saudíes y los qataríes y países occidentales que habían apoyado a los terroristas desde el principio de la crisis.
En una pregunta sobre si Siria había apoyado a Daesh al inicio de la crisis con el fin de dividir la oposición, el presidente Al-Assad dijo que algunos funcionario norteamericanos entre ellos, Hillary Clinton, reconocieron que la organización de al-Qaeda se fundó gracias al apoyo ideológico y financiero de los EE.UU. y de Arabia Saudita, lo mismo pasa con Daesh y el Frente al-Nusra que son facciones de la al-Qaeda, en respecto a Daesh, dicha organización se creó en 2006 en Iraq y su líder era un prisionero en las careles norteamericanos y luego se puso en libertad, por lo siguiente Siria no tiene nada que ver con la creación de Daesh, en el mismo contexto el ex-primer ministro británico Tony Blair dijo ¨la invasión de Iraq ayudó la existencia de Daesh”.
Sobre las partes geográficas controladas por el gobierno sirio, el presidente al-Assad ha señalado que lo que importa es el número de personas que viven en las zonas controladas por el gobierno, afirmando que: “La mayor parte de las zonas controladas por los terroristas habían sido desocupadas de sus habitantes quienes se escaparon a las zonas controladas por el gobierno”.
En el mismo contexto, el presidente al-Assad ha añadido: “desde el punto de vista militar, el ejército no puede estar en todas las partes en Siria.”
En cuanto a la conferencia de Viena, el presidente al-Assad dijo que el comunicado de Viena dice todo el proceso político es depende de lo que los sirios deciden, agregando que el comunicado de Viena no dijo nada con respecto al presidente.
Asimismo, el presidente Al-Assad dijo que no hay líneas rojas relativas a la celebración de elecciones presidenciales si los sirios si los sirios se pondrían de acuerdo.
“El momento de la salida de la crisis inicia después de la derrota del terrorismo, ya que es imposible lograr nada políticamente mientras que los terroristas se apoderaron de varias áreas en Siria”, ha insistido el presidente.
El presidente al-Assad dijo que “cualquier persona que lleva el arma y aterroriza a la gente, y destruye las propiedades públicas y privadas no se considera opositor”. El presidente Al-Assad agregó que la verdadera oposición en Siria tiene que ser elegida por los sirios.
En cuanto a los refugiados sirios en Europa, el presidente al-Assad expresó su pesadumbre por el sufrimiento de estas personas que constituyen una pérdida para Siria, tiendo en cuenta los motivos que los impulsan a abandonar Siria, a saber, las amenazas de los terroristas, la destrucción de gran parte de la infraestructura y el embargo occidental impuesto sobre Siria.
Por otra parte, el presidente al-Assad dijo que lo único que se hizo desde el principio de la crisis es la lucha contra el terrorismo y el apoyo al diálogo.
En relación con los intentos occidentales para cambiar el presidente, al-Assad dijo que el primer responsable de lo que está ocurriendo en Siria es Occidente que apoyó a los terroristas de Daesh y del Frente al-Nusra en Siria.
Sobre su visita a Moscú, el presidente al-Assad dijo que el objetivo de la visita fue la realización de una revisión de la situación militar y el proceso político, que la calificó de “muy fructífera”.
El al-Assad expresó que la guerra en Siria no es una guerra religiosa, sino es una guerra entre los que se habían desviado de la verdadera religión.
El presidente Al-Assad subrayó la diversidad étnica y sectaria es la verdadera razón de la moderación en Siria, por lo que es fundamental que la presencia cristiana es uno de los más grandes en la historia de Siria.
El al-Assad, concluyó la entrevista, diciendo que el número de musulmanes que fueron asesinados en Siria es mucho más de los cristianos, por lo que no podemos decir que los actos terroristas están dirigidos especialmente contra los cristianos.