Los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa hablaron este jueves de la brutal represión que sufrieron ayer en la carretera de Tixtla-Chilpancingo, hecho al que calificaron como un nuevo ejemplo de la falta de derechos humanos en el estado mexicano de Guerrero.
En una rueda de prensa, denunciaron que “no fue un enfrentamiento, fue ataque”, porque desde un primer momento las autoridades aplicaron el uso excesivo de la fuerza.
De los ocho estudiantes heridos durante la represión, cuatro se encuentran en estado de gravedad y deberán ser intervenidos quirúrgicamente, precisaron.
Uno de los jóvenes heridos es Ernesto Guerrero Cano, sobreviviente de los hechos violentos ocurridos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014 en la ciudad de Iguala, que dejaron un saldo de 43 estudiantes desaparecidos.
En tanto, la Secretaría de Seguridad Pública mexicana puso en libertad hoy a los 13 normalistas que habían sido detenidos y los entregó a la comisión estatal de Guerrero, donde cada uno de ellos fue recibido por sus familiares y compañeros.
“Lo que pasó ayer va por la búsqueda y presentación de los 43 estudiantes desaparecidos. Continuaremos en lucha con sus padres y familiares”, afirmaron durante la conferencia de prensa.
