La presidenta Cristina Fernández de Kirchner obtuvo hoy un nuevo fallo favorable en Italia tras la demanda iniciada contra el diario Corriere Della Sera.
El medio gráfico había sido condenado por «difamación con real malicia» en primera instancia por publicar una nota siendo plenamente consciente de que su contenido era falso e injurioso.
En ese entonces, se le ordenó pagar una indemnización de 41.000 euros a la mandataria, dinero que fue donado en su totalidad al Hospital de Niños de La Plata; y también se dispuso una multa al entonces director del Corriere, Paolo Mieli, y a la periodista que escribió la nota, María Gisia Faschietti.
Ese periódico había publicado en 2008 una nota en donde aseguraba que Cristina, en el marco de su asistencia a la cumbre sobre el hambre organizada por la FAO, había comprado alhajas -entre ellas aros, relojes y pulseras con oros y diamantes- en la exclusiva joyería Enigma, del famoso diseñador Gianni Bulgari, por un valor superior a los 140.000 euros.
En el artículo, titulado «Dolce Vita y Hambre», la autora Maria Gisia Fiaschetti había sostenido también que la Presidenta adquirió ropa de cama en Pratesi, una histórica tienda textil italiana que comercializa sábanas «de lujo».
El entonces vocero presidencial Miguel Núñez publicó una desmentida oficial acerca de aquel falso «tour de compras», y reclamó por «vía formal y pública» la «desmentida del artículo carente de verdad y fundamento, así como el correspondiente pedido de disculpas».
Cuando se conoció la sentencia en primera instancia en 2013, la presidenta informó sobre el hecho y recordó que el artículo fue publicado también por el matutino porteño La Nación, que «para el caso es lo mismo, porque cuando uno reproduce en su diario el artículo de otro, la responsabilidad penal-civil es exactamente la misma».
En su página web, Cristina argumentó su decisión de demandar al diario dejando en claro que no lo hacía por ella «sino porque sentí que le estaban faltando el respeto a la República Argentina», y destacó que «nunca en la vida le había hecho juicio a nadie», además de recordar que fue ella quien impulsó la derogación en el país de la norma por la que periodistas o cualquier otra persona pueden ser condenadas por el delito de calumnias e injurias.
Luego de la decisión de la justicia, en mayo de 2013, el Corriere Della Sera dedicó un reducido espacio al hecho y afirmó que «los abogados recurrirán la condena», al argumentar que Faschietti «tuvo información por parte de fuentes fiables».
Unos días después el director del diario, Ferruccio de Bortoli, pidió oficialmente disculpas en nombre del diario por el error cometido; así como también La Nación, que lamentó «haberse hecho eco del contenido de aquella crónica».
Finalmente se conoció hoy el fallo de la Corte de Apelaciones de Roma que ratificó el fallo de la justicia italiana en primera instancia.