El papa Francisco consideró este jueves ante el Congreso de EE.UU. que una sociedad política es exitosa cuando busca satisfacer las necesidades comunes y estimula el crecimiento de sus miembros, especialmente de aquellos que se encuentran en situaciones de gran vulnerabilidad o riesgo.
Durante un discurso pronunciado ante el Congreso de Estados Unidos, en el tercer día de su visita apostólica al territorio norteamericano, el Sumo Pontífice expresó que todas las personas de un país tiene una responsabilidad social. “Todos ustedes tienen responsabilidades como miembros del Congreso, a través de sus actividades deben permitirle a este país crecer como nación”, dijo a los legisladores.
Francisco, el primer Papa en visitar ese órgano estadounidense, se mostró interesado, además, en aprovechar esta oportunidad para establecer un diálogo con las mujeres y hombres que dedican sus días a trabajar de manera honesta a fin de construir una mejor vida para sus familiares. “Estos son hombres y mujeres que no se preocupan solo por pagar los impuestos sino también por sostener la vida de la sociedad”, sostuvo.
Al mismo tiempo, manifestó, me gustaría entrar en un diálogo con las personas mayores, quienes tienen una gran sabiduría y continúan trabajando a favor de esta tierra.
«Yo también soy hijo de esta América», dijo el Papa Francisco al iniciar su intervención ante el Congreso estadounidense. «Les estoy agradecido por su invitación a hablar frente al Congreso de la tierra de la libertad y la casa del coraje», dijo, citando un pasaje del himno nacional estadounidense.
Francisco pidió abolir la pena de muerte. «Cada vida es sagrada, cada persona tiene inalienable dignidad», sostuvo. «La regla de oro nos recuerda la responsabilidad que tenemos de custodiar y defender la vida humana en todas las etapas de su desarrollo. Esta certeza es la que me ha llevado, desde el principio de mi ministerio, a trabajar en diferentes niveles para solicitar la abolición mundial de la pena de muerte», dijo.
«Ninguna religión es inmune a formas de engaño individual o extremismo ideológico», prosiguió. «Esto significa que debemos estar particularmente atentos atoda forma de fundamentalismo, tanto religioso como de otro tipo», explicó Francisco.
«Imitar el odio y la violencia de lostiranos y asesinos es el mejor modo de tomar su puesto», dijo. «Esto es algo que ustedes, como pueblo, rechazan. La nuestra debe ser una respuesta de esperanza y de sanación, de paz y de justicia», agregó.
El papa Francisco citó, en sudiscurso en el Congreso, cuatro íconos estadounidenses,comenzando por Abraham Lincoln, «un custodio de la libertad quetrabajó incansablemente para que esta nación, bajo Dios, tuviera un nuevo nacimiento en nombre de la libertad».
También a Martin Luther King, a quien evocó asimismo ayer en la Casa Blanca, Dorothy Day, ex simpatizante comunista convertida al catolicismo, y Thomas Morton, monje trapense y místico, autor de más de 70 libros sobre espiritualidad, justicia social y pacifismo.
En primera fila del Capitolio están el secretario de Estado John Kerry, y el vicepresidente Joe Biden, el gabinete del presidente Barack Obama, los jueces de la Corte Suprema, y el secretario del Tesoro, Jacob Lew.