Por José Luis Ponsico / En los 75 años de fútbol profesional River y Boca produjeron varias curiosidades además de las conocidas estadísticas. Una sola vez se enfrentaron definiendo, «finish», el 22 de diciembre del ´76 por el Torneo Nacional.
Recordado gol de tiro libre de Rubén Suñé, cancha de Racing, mientras Ubaldo Fillol hacía la «barrera». Uno a cero y campeón Boca. El árbitro Andrés Ithurralde marcó «centro de campo». Esa noche Hugo Gatti, propio testimonio conocido al final de su carrera, 1988, tuvo la mejor atajada.
Una pelota «bombeada» puesta en el ángulo por Juan José López, borde de área, cuando el partido estaba 0 a 0 y el arquero de Boca, volando con manos extendidas hacia la izquierda alcanzó a mandarla al córner. «La del Negro López la mejor atajada de mí vida. En un cuarto de siglo», confesó el «1» hace mucho.
En el ´72 comienzo del Nacional, River ganó 5 a 4 en el partido que al cabo dejó mayores emociones. Ganaba River 2 a 0, goles de Ernesto Mastrángelo y Oscar Mas. Boca lo dió vuelta. Cancha de Vélez, «Viejo Fortín». Llegó a estar 4 a 2. Goles del cordobés Hugo Curioni, Ramón Ponce, tiro libre y Osvaldo Potente, dos. River, goles de «Pinino» Mas y Carlos Morete, dos entradas fulminantes, al final hizo suyo el «fantástico superclásico» del Nacional´72 que terminó ganando San Lorenzo, invicto.
Reinaldo Merlo entre 1969 y el ´83 jugó 42 partidos River-Boca. Un «top». Silvio Marzolini, 1960
al ´72 disputó 37 encuentros entre los dos «grandes». «Mostaza» Merlo ganó 15, empató 14 y perdió 13. El lateral de Boca, iniciado en Ferro, 14 ganados, 14 empatados y 9 perdidos.
Ángel Labruna convirtió 16 goles a Boca, 35 partidos. Desde 1941 al ´58. Paulo Valentím y Martín Palermo, «verdugos» de River. El goleador brasileño batió récord. Diez goles entre 1960 y 1964. Palermo lo supera si se cuentan amistosos.
Los goleadores récords, Labruna convirtió 292 en su carrera y Palermo 236. El segundo lugar entre Oscar Mas y Roberto Cherro, parejo. «Pinino», puntero izquierdo, hizo 219. El mítico goleador de Boca de los años´30, alcanzó 221. Jugaba por «adentro».
El tercer lugar, goleadores históricos, tiene otros nombres y apellidos notables. Para Boca, Francisco Varallo -potencia en el remate- hizo 194. En River, Bernabé Ferreyra convirtió 187. Detalle: de todos los nombrados, Bernabé «Mortero de Rufino», el único que tiene más goles que partidos jugados.
Norberto Menéndez es el único jugador que habiendo jugado en River y en Boca alcanzó tres títulos con cada uno. En River, el delantero que llegó a la selección con veinte años de edad, ganó títulos entre 1955/57. El «9» habilidoso, goleador. Gran pegada.
«Beto» Menéndez tuvo breve paso por Huracán en el ´61. Lo adquirió Alberto J. Armando para Boca. Ganó tres títulos 1962/64/65 con la «xeneize». En Boca, delantero cerebral, asistente en la mayoría de goles del carioca Paulo Valentím.
El «Petiso» Menéndez, atacante talentoso, «cascarrabias», de Barracas y River lo había a buscar al Club Sacachispas. Murió joven hace veintidós años. Muy recordado por Ubaldo Rattín y Marzolini, hoy en la mutual de Boca.