Por Ariel Spini / Nuevas voces se sumaron en apoyo a la decisión del gobernador bonaerense y candidato presidencial, Daniel Scioli, de habilitar paulatinamente el retorno del público visitante a los partidos de Primera División que se disputen en la provincia de Buenos Aires.
Si bien aún la medida no fue oficializada, el vicegobernador Gabriel Meriotto confirmó el domingo pasado que el Ejecutivo bonaerense trabaja para efectivizarla y que se preparó a 18.000 nuevos efectivos policiales para que se pueda garantizar la seguridad en los espectáculos “sin descuidar otros aspectos”.
“Si cada uno cumple el rol que tiene que cumplir se torna todo mucho más fácil para poder volver a la fiesta que significa un partido con dos hinchadas”, agregó.
Funcionarios nacionales también respaldaron la idea de Scioli, entre ellos, el jefe de Gabinete y candidato a gobernador bonaerense del FpV, Aníbal Fernández.
Esta iniciativa debe enmarcarse en una serie de debates impulsados desde el Senado provincial, que permitieron llegar a la sanción de ley que crea las Unidades Fiscales especializadas en violencia en espectáculos deportivos y delitos conexos.
A fines de 2013, el titular de la Cámara Alta anunció en su programa radial en AM Provincia, que comenzaba a proyectarse una normativa para dotar de mayores y mejores herramientas a la justicia a la hora de combatir la violencia en el deporte. La ley se sancionó finalmente el 20 de noviembre de 2014.
Tras respaldar el regreso de los visitantes a las canchas, el periodista de Fútbol para Todos e integrante del Colectivo Rodolfo en Proyecto Nacional, Diego Olave, dijo a AgePeBA que las fiscalías “le dan a la justicia una herramienta muy importante que va a traer buenos resultados”.
En la misma línea se expresó el presidente del Club Atlético Temperley, Hernán Lewin, quien aseguró que “hay que hacer un trabajo fuerte y articulado para lograr que vuelvan los visitantes”.
En diálogo con esta agencia, Lewin planteó la necesidad de “establecer reuniones entre el gobierno, las autoridades del fútbol argentino y los presidentes de los clubes para lograrlo y llegar al objetivo”.
La articulación entre los actores involucrados en la problemática resulta clave para acabar con la violencia relacionada con el deporte.
Olave destacó que “hay un compromiso institucional de respaldar la vuelta del público con acciones concretas para que los hechos de violencia no se vuelvan a suceder en las canchas”.
“Es una fuerte decisión política pensar el regreso inmediato de los visitantes. Tenemos que trabajar muchísimo todos los que estamos en el mundo del fútbol, los dirigentes, las instituciones del Estado, los jugadores, los periodistas, para que sea un regreso sin fisuras”, explicó.
Asimismo, aseveró que de concretarse la medida “sería un gran paso para el fútbol argentino, porque podemos empezar a vislumbrar una etapa superadora”.
En la provincia de Buenos Aires, con una gestión que trabaja fuertemente para combatir la violencia, la fiesta del fútbol en las canchas está cada vez más cerca de incluir a todos y todas.