La ceremonia, que se llevó a cabo en la sede del Museo ubicado en la avenida del Libertador 1473 de la Capital Federal, tuvo lugar en la sala dedicada al maestro Antonio Berni. Su obra «La pesadilla de los injustos» es precisamente la que se pudo ver a espaldas de la mandataria durante el acto.
Las obras inauguradas abarcan la remodelación de 18 salas que conforman una superficie de 3.200 metros cuadrados, 16 en el primer piso y dos en el segundo del museo, todas dedicadas al arte argentino e internacional del siglo XX.
Durante el acto, la mandataria también procedió a restituir más de 4.000 piezas arqueológicas pertenecientes a Ecuador y Perú, a través de los respectivos embajadores de esos países.
«Es un honor y un placer estar restituyendo su patrimonio cultural a países como Ecuador y Perú, en un mundo que se ha caracterizado en arrebatar el patrimonio cultural a esos pueblos», dijo la jefa de Estado.
Y agregó que «sería importante que se pueda cobrar una patente cultural cuando no nos devuelven los tesoros culturales». «De esa manera también viviríamos en un mundo mejor», subrayó.
Participaron de la ceremonia el gobernador bonaerense Daniel Scioli; el jefe de gabinete Aníbal Fernández; el secretario General de la Presidencia, Eduardo «Wado» de Pedro; la ministra de Cultura, Teresa Parodi; el canciller Héctor Timerman; y los ministros de Economía, Axel Kicillof, de Educación, Alberto Sileoni, y de Salud, Daniel Gollan.
También asistieron el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde; el diputado nacional Andrés Larroque; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro; el presidente del Instituto de Cultura bonaerense, Jorge Telerman; y la directora ejecutiva del museo, Marcela Cardillo, entre otros funcionarios y legisladores, además de numerosos artistas como Daniel Santoro, Marta Minujín, Sara Facio, Adriana Lestido y Rep.