.
Por José Luis Ponsico / La cara de Ramón Díaz en el quinto gol argentino, centro perfecto del zurdo Ángel Di María a la cabeza de Sergio Agüero, 1.67 estatura, decía todo. Paraguay vivió una «paliza» en Concepción, pintoresca ciudad chilena.
En veinte años de trayectoria, técnico, el «Pelado» padeció otras goleadas. Todas en River. Las dos primeras en el Clausura ´97 que al cabo ganó el «millonario». Tras siete triunfos consecutivos.
Estudiantes de La Plata ganó a River en el Monumental 4 a 1, dos de Martín Palermo -en Boca convirtió nueve más, oficiales-. La fecha 10 y enseguida hubo otra goleada para los de Ramón. River viajó a Santa Fe y Colón metió cinco. Tres de Christián Castillo -en el ´98 pasó al «millonario» pedido por Ramón- y dos del uruguayo Marcelo Saralegui, figura del partido.
La vuelta del paraguayo Celso Ayala y Eduardo Berizzo, ausentes por lesiones y suspensiones; sumada a otro retorno, zurdo Sergio Berti, permitió a River ganar siete partidos consecutivos. Y vuelta olímpica.
Faltando una fecha, inalcanzable. En medio de la crisis que vivía la Argentina, tiempos de «default», River cayó, amistoso de verano ´02 con Boca, 0-4. Gran partido del juvenil Ariel Carreño en el «xeneixe».
En River no se afirmaron dos delanteros con trayectoria en Europa que no volvieron bien físicamente. El goleador marplatense Juan Esnáider y otro, uruguayo Daniel Fonseca. Autor de un golazo de tiro libre.
Ramón Díaz destacó la dignidad de sus dirigido en una noche donde los seis goles argentinos del seleccionado de Gerardo Martino le cayeron al riojano como un mondongo helado. El «Tata» durmió feliz.
