Benjamín Santino Caballero, un bebé de un año y nueve meses, fue asesinado a golpes en el partido bonaerense de Almirante Brown, y detuvieron a su madre y el padrastro, acusados de “homicidio agravado por el vínculo y alevosía”.
Fuentes judiciales informaron hoy que el hecho se descubrió este jueves, cuando la pareja dejó al niño sin signos vitales en el hospital Arturo Oñativia, de Rafael Calzada, alegando que se había caído de una cama.
Sin embargo, la autopsia determinó que había muerto como consecuencia de golpes y no de una caída. El cuerpo presentaba un traumatismo craneoencefálico, fracturas en las costillas 9 y 10 y una úlcera estomacal.
Los fiscales Lorenzo Latorre y Jorge Grieco, de la UFI 4 de Lomas de Zamora, indicaron que, tras conocer el resultado de la pericia, se ordenó la detención de la madre del niño, Analía Echeverría, de 20 años, y de su pareja y padrastro de la víctima mortal, José Pardo.
Las capturas se concretaron este mediodía y los acusados fueron llevados a los tribunales de Banfield, donde se negaron a prestar declaración.
Hace poco más de una semana, se registró un caso similar en Derqui, partido de Pilar, donde una niña de un año y once meses murió tras haber sido violada y sometida a torturas con quemaduras, mordeduras y golpes perpetrados por su padrastro.
El atacante, identificado como Luis Alonzo, de 25 años, había sido detenido cuando intentaba escaparse y llevado a la alcaidía de San Martín, donde el sábado apareció ahorcado con una sábana atada en la ventana de la celda.