«El valor de la unidad es irrenunciable”, disparó en diálogo con esta agencia José Luis Casares, integrante de la mesa político sindical del Proyecto Nacional. De esa manera el sindicalista bonaerense coincidió con Gabriel Mariotto quien planteó la necesidad de cumplir con el apotegma peronista de “Primero la patria, después el movimiento y al final los hombres” para garantizar el triunfo del Frente para la Victoria en las elecciones generales de octubre de 2015.
En ese marco el sindicalista subrayó que “creemos que con unidad, solidaridad y organizados podemos hacer triunfar nuestro proyecto nacional y popular”. “La desunión es mala siempre, para el país”, añadió y sostuvo que “siempre está primero la Patria, es irrenunciable”.
Asimismo consideró que “desde el movimiento obrero creemos que el proyecto nacional y popular debe profundizar su lucha contra la informabilidad laboral, es una bandera irrenunciable para nosotros”. “Tenemos que trabajar con aquellos compañeros que no les ha llegado los beneficios de este modelo tan justo y que ha significado la recuperación de los derechos para los trabajadores y el pueblo”, agregó respecto a las batallas del FpV de cara al futuro.
“En estas elecciones hay que expresar claramente el concepto de la solidaridad, un concepto clave que en los años noventa fue vaciado de nuestro pueblo”, aseveró Casares. En la misma línea indicó que “reivindicamos esta concepción de solidaridad que expresa nuestro proyecto nacional y popular”.
En ese sentido sentenció que “debemos defender este modelo de desarrollo de la industria, esas actividades son las que permiten aumentar empleos dignos y puestos de trabajo” y apuntó contra las empresas multinacionales que “priorizan llevar sus ganancias al exterior, a su país de origen”. “Es muy importante que nuestro proyecto nacional siga priorizando el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas y del consumo interno”, concluyó.
