“En la capital la población de inquilinos representa un 30 por ciento, esto significa 350.000 viviendas que se encuentran en alquiler en una ciudad que tiene la particularidad de tener, prácticamente, un 50% de viviendas en relación a la población. La población no crece, lo único que crece es la construcción. En ese contexto, se torna cada vez más exigente los requisitos para alquilar, el mercado pone las condiciones y el gobierno de la ciudad no interviene para nada”, aseguró el diputado del Frente Progresista y Popular Fernando Muñoz.
Días atrás, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció un proyecto denominado «Alquilar se puede», ofreciendo una supuesta solución simple para los inquilinos porteños, según sostiene el diputado, “la oferta que hace el PRO es efectista y engañosa”, ya que “sólo pueden inscribirse menores de 35 años; se ofrece únicamente para 2.000 personas en los próximos seis meses -desde marzo hasta agosto- y serán 300 personas beneficiadas por mes, en un universo de 700.000 inquilinos”.
Además, Muñoz remarcó que la presentación del proyecto de Mauricio Macri, Alquilar se puede, “es tan oportunista y electoralista, que, incluso, estuvo ausente del presupuesto 2015 que esta Legislatura le votó hace apenas un mes”.
Según remarcó el diputado, se realizó una encuesta que arrojó tres puntos fundamentales que reflejan las prioridades de los inquilinos a la hora de llevar adelante su alquiler, en diálogo con esta agencia, Muñoz detallo los resultados: “Centralmente, la principal problemática es la cuestión de la comisión inmobiliaria, el techo que se puede cobrar por alquiler representa apenas un poco más de un mes, el 4 por ciento de contrato y la ciudad eso no lo controla, se están cobrando hasta dos meses de comisión previo al alquiler”.
“Apareció a su vez el problema de la garantía – explicó – no solamente se pide una garantía de propiedad de la Ciudad de Buenos Aires, sino que tendenciosamente se va yendo hacia una demanda más de garantía propietaria y de familiar directo, acompañado con recibo de sueldo en blanco”, aseguró, y además remarcó que la encuesta realizada tuvo en cuenta a los inquilinos tanto de trabajo formal con sueldo en blanco, como también al sector de trabajo precarizado.
La tercera cuestión, según informó Muñoz, plantea que el 50 por ciento de los ingresos de la población se va en alquileres, “es un porcentaje realmente elevado para un inquilino”
