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El proceso oral y público que comenzó ayer, y que estaba previsto finalizara el mismo día, fue postergado por el tribunal ante la ausencia de dos testigos, Tamara Villar, quien era pareja de Sandoval Fontana en 2005, y de su padre, Pedro Villar.
En la audiencia de ayer, el fiscal Carlos Cearras leyó el auto de elevación a juicio en el que se lo acusa a Porcel de encubrir al ex agente de inteligencia de la Gendarmería Nacional Víctor Rei, apropiador de Pedro Sandoval Fontana, de fraguar el allanamiento ordenado por la Justicia Federal para evitar que se tomen de forma correcta las muestras genéticas necesaria para el cotejo de ADN del nieto apropiado.
El caso se inició luego de que en el juicio oral en el que se condenó a Rei por la apropiación de Pedro Sandoval Fontana quedara en evidencia que no se trató de un obrar negligente de Porcel, sino que estas irregularidades se cometieron deliberadamente.
Sandoval reveló ante los tribunales los detalles del caso y explicó cómo entregó una bolsa con un peine, un cepillo de dientes, una remera y una toalla que le había dado su apropiador a la comisión policial encabezada por Porcel, con rastros que no le pertenecían, durante el allanamiento ordenado por la justicia.
“Yo no sabía que era hijo de desaparecidos. Lo que me ayudó mucho fueron las Abuelas y principalmente ver el juicio contra mi apropiador. Fue la última venda que me sacaron de los ojos para poder ver toda la realidad», admitió Sandoval en diálogo con Infojus.noticias.
Por su parte, Porcel negó conocer a alguien del entorno de Sandoval y responsabilizó a sus superiores del allanamiento en el domicilio de la localidad de Don Torcuato.
También declaró Alejandro Antonio Ladra que participó del allanamiento y que fue sobreseído; y la directora del Banco Nacional de Datos Genéticos, María Belén Rodríguez Cardoso.
Pedro es hijo de Liliana Clelia Fontana Deharbe y de Pedro Fabián Sandoval, secuestrados el 1° de julio de 1977, cuando la joven estaba embarazada de dos meses y medio.
Las denuncias en la justicia por parte de sus familiares y de Abuelas de Plaza de Mayo permitieron establecer que el niño había sido inscripto como hijo propio del ex agente de inteligencia Victor Rei y de su esposa, y como el joven se negaba a realizarse los análisis genéticos la justicia ordenó la recolección de objetos personales de su domicilio.
Del allanamiento a cargo de Porcel, la justicia pudo determinar que el operativo fue realizado sin los testigos exigidos por la ley, y que el joven y su novia fueron quienes indicaron a la Policía los objetos que debían llevarse, de los cuales ninguno contenía ADN de Pedro.
Tras detectarse las irregularidades, se realizó un nuevo allanamiento que por fin permitió tomar la muestra de ADN del joven, quien recuperó su identidad el 14 de julio de 2006.