John W. Cooke, nacido en La Plata el 14 de noviembre de 1919, llegó a ser una de las figuras más destacadas y revolucionarias del peronismo. Electo diputado nacional a los 25 años, intelectual y docente, fue designado por el ex presidente Juan Domingo Perón como su representante y apoderado del Movimiento Nacional Justicialista tras el Golpe de 1955.
“Hoy cumpliría 95 años el compañero John William Cooke. Levantamos en su nombre las banderas de la patria liberada”, remarcó el vicegobernador Gabriel Mariotto en su cuenta de Twitter.
No es la primera vez que Mariotto homenajea al histórico dirigente. En septiembre último, a 46 años de la muerte de Cooke, el vicegobernador y titular del Senado bonaerense no sólo lo recordó, sino que además cumplió con su última voluntad al arrojar sus cenizas al Río de la Plata.
Ese emotivo y multitudinario acto tuvo lugar en el Parque de la Memoria. “El deber ser que nos dejó John William Cooke hoy tiene más valor que nunca porque transitamos desde el 2003 con Néstor y Cristina por la liberación de la Patria y de América Latina”, dijo entonces Mariotto.
Las cenizas de Cooke permanecieron escondidas primero al cuidado de su esposa, Alicia Eguren, y luego, cuando ella fue secuestrada por la última dictadura militar, quedaron a cargo de compañeros del revolucionario en distintos domicilios de la Capital Federal.
Poco después del acto en el Parque de la Memoria, Mariotto encabezó una sesión en el Senado para declarar al ex diputado nacional como “Ciudadano Ilustre Pos Mortem» de la provincia de Buenos Aires.