Julián Axat se refirió así al caso Luciano Arruga, el joven desaparecido por más de cinco años y cuyo cadáver apareció el pasado viernes en el cementerio de la Chacarita, donde había sido enterrado como NN.
“Queda por investigar si el hecho del accidente no fue armado. Hasta ahora no hay ningún elemento que así lo diga pero, dado que el chico había sido víctima de abusos policiales, corresponde investigar si el accidente está vinculado a esa historia de hostigamiento”. Sucede que el expediente de la morgue detalla que Luciano Arruga fue atropellado por un auto en el cruce de la Av. General Paz y Castro, donde se encuentra un destacamento de la Policía Bonaerense.
En ese sentido Axat aseveró que “el caso Luciano Arruga demuestra que hay ineficiencia estatal”.
“Cómo es posible que para un chico que tuvo una historia de hostigamiento policial y sus huellas dactilares estaban registradas en esos prontuarios como menor de edad, no se hayan realizado los cotejos correspondientes con los cuerpos NN que estaban en el momento de los hechos en los hospitales”, reflexionó; y apuntó: “da a entender que los fiscales del fuero de la provincia de Buenos Aires que actuaron en esos días eran unos ineptos o estaban en connivencia con la policía”.
“La policía fue ineficaz, hay que descubrir si fue cómplice”, remarcó Axat. Asimismo coincidió con la familia de Luciano y remarcó que: “habría que ver, en caso de que el desaparecido fuese un chico de Barrio Norte de 16 años, si la policía no hacía los cotejos de huellas dactilares de manera inmediata”.
Agregó que, por haber ocupado el cargo de Defensor en el Foro Penal Juvenil en La Plata, “tengo la experiencia que cuando se trata de un adolescente de clase media, de clase media alta, rápidamente todos los mecanismos estatales se ponen al servicio de esa familia; y en los casos donde los chicos pertenecen a los sectores populares, aparece la burocracia, los olvidos, las trabas estatales”.
A su vez se refirió a la denuncia realizada con el juez Luis Federico Arias en 2009, donde informaban acerca de casos de reclutamiento de adolescentes por parte de las fuerzas de seguridad provincial. “La hicimos en 2009, la repetí en 2010 y la volví a repetir en 2012 ante la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires”, destacó.
“Una seguidilla de siete casos de chicos asesinados por la Policía, disfrazando los hechos como supuestos enfrentamientos entre los efectivos y los jóvenes, cuando en realidad fueron asesinatos por la espalda”, recordó.
“En esos hechos hay elementos para sospechar sobre reclutamientos de adolescentes”, apuntó. “La Corte le ha mandado a la procuradora general de la Provincia la investigación de los siete casos denunciados y ésta no ha hecho nada”, concluyó Axat.
