La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reafirmó hoy que “apostar a la industrialización es una decisión de carácter político, público y estatal”.
Lo dijo al encabezar la cena por el Día de la Industria en Tecnópolis, donde además pidió a los empresarios que entiendan que «necesitamos mantener el poder adquisitivo de nuestros trabajadores» para «consolidar» la demanda interna y garantizar el «desarrollo industrial» del país.
«Lo que tienen que entender los empresarios es que necesitamos mantener el poder adquisitivo de nuestros trabajadores, porque son ellos uno de los componentes fundamentales de este modelo de desarrollo», afirmó.
Cristina sostuvo que «si no se boicotea el plan Procreauto estamos en condiciones de acercarnos a las mismas ventas del año pasado. Parece mentira que la gente quiera comprar autos y determinados empresarios no quieran vender».
Asimismo, señaló que, descontando «la caída que tuvo el complejo automotriz» por la reducción de la demanda externa, «hoy la industria estaría creciendo entre el 1,2 y 1,5 por ciento».
«Es importante sostener el mercado interno», remarcó Cristina y agregó que debido a «lo positivo que ha sido el plan Procreauto para estimular la demanda interna, determinamos que a fines de agosto se vendieron más de medio millón de unidades».
Al hablar ante más de 3 mil empresarios, la presidenta afirmó que el país «necesita empresarios con vocación nacional que inviertan en desarrollo y en tecnología porque ahora la clave es la innovación y el desarrollo tecnológico».
La mandataria, que estuvo acompañada por el grueso de su gabinete, destacó las políticas públicas a favor del regreso de científicos argentinos que vivían en el exterior al sostener que «este Gobierno tomó el desafío de unir la ciencia con el capital» y «no mandamos a los científicos a lavar los platos».
También hizo alusión al juez de Nueva York, Thomas Griesa, y remarcó que el interés no son sólo los 1.500 millones de dólares reclamados por los fondos buitre porque «quieren en realidad tirar abajo la reestructuración de la deuda externa y que el país se vuelta a endeudar».
En ese sentido, mencionó todos los logros del país en estos años en materia económica y al respecto señaló que «justamente a un juez municipal se le viene a ocurrir reclamar a la Argentina 1.500 millones de dólares, por favor no seamos tontos».
«El potencial de la Argentina no les gusta a algunas potencias» y dirigiéndose a los empresarios enfatizó: «No se engañen, no se distraigan, cuiden sus empresas. Yo tengo un año y medio de mandato, pero ustedes tienen toda la vida para cuidar sus empresas».
Destacó también la votación realizada ayer en Naciones Unidas que creó un mecanismo de regulación de la reestructuración de la deuda soberana para combatir a los fondos buitre y dijo que «esa decisión es un orgullo para los argentinos y también esa votación fue un gran logro para la humanidad».
«A algunos los convencieron que eran altos, rubio y de ojos celestes; yo no quiero ser rubia y de ojos celestes, soy argentina y digo que tenemos que defender este modelo», afirmó la Prersidenta.
«Les pido que esto que hemos logrado no se derrumbe, que se siga con este proceso de industrialización y valor agregado», subrayó la jefa de Estado.
Por último, expresó que «si logramos veinte o treinta años de política consecutiva en poder adquisitivo, conservar a YPF, convenciones colectivas, tengan la plena certeza de que vamos a ser un país diferente al que nosotros recibimos».