Por José Luis Ponsico/ A la hora de defender San Lorenzo mejoró con el «Patón» y perdió «frescura» en ataque cuando transfirió al habilidoso rosarino Ángel Correa. En segunda final, sin Ignacio Piatti, costó encontrar la cuota de desequilibrio, pero de todas maneras se logró la copa olimpica.
El Estudiantes de Osvaldo Zubeldía, en los años 1967 y 1970, con mayoría de jugadores del club y algunos refuerzos de los no precisamente “cotizados” ganó tres ediciones de la Copa Libertadores.
Asimismo, Independiente en comienzos de la década de los´70 cuando Roberto Ferreiro, después de 15 años, se retiró y luego se hizo cargo de la dirección técnica, tras los éxitos del popular «Colorado» Manuel Giúdice y el brasileño Oswaldo Brandao como DT, le sucedió algo similar.
Boca de Juan Carlos Lorenzo, a fines de los´70, con un equipo duro, fuerte en defensa y juego rápido, que fulminaba de contrataque. El “xeneize” ganó dos ediciones consecutivas, la de 1977 y 1978. Veinte años después de la mano de Carlos Bianchi Boca repitió en los´90, con un equipo equilibrado al «estilo Vélez» del ciclo 1993/94. El «Virrey» llevó al club de Villa Luro a ganar la Copa Libertadores y la copa del mundo Interclubes.
Una de las figuras principales del Xeneise en los noventa fue Juan Román Riquelme, 23 años, buena defensa. También había un apogeo de colombianos como Oscar Córdoba, Jorge Bermúdez, Mauricio Serna, que encontraban al rápido y sagaz Guillermo Barros Schelotto, para que Martín Palermo concretara los goles.
Hoy, no muy cerca de la leyenda del juego «mágico» de San Lorenzo del´46, Farro, Pontoni, Martino y Perucca.Todos en la selección del´45 en Chile. Campeones. También el recuerdo de «Los Matadores del´68», Metropolitano que San Lorenzo ganó invicto -primer equipo en lograrlo- y con seis jugadores en selección: Albrecht, Telch, Cocco, Rendo, Fischer y Veglio,
Bauza tuvo como “primer maestro” al legendario Ángel Tulio Zof, lo honró en templanza para conducir y condición humana adquirida en Rosario Central a fines de los´70 en Rosario.