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El vicegobernador de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, presentó esta semana la batería de iniciativas denominadas “Los oficios para seguir creciendo”, que se enmarcan en el plan «Educación de calidad y desarrollo» que impulsa el Senado bonaerense, para incluir a los jóvenes bonaerenses y alejarlos de la vulnerabilidad.
Estas propuestas fueron respaldadas por diferentes intendentes de la Provincia, entre los que se encuentra el de Florentino Ameghino, Francisco Iribarren. En diálogo con AgePeBA, el jefe comunal dijo: «me parece muy buena la propuesta, porque es necesario crear mecanismos de cercanías con los jóvenes que por diversas razones quedan al margen o transitan por el camino de la marginalidad, y por eso a cada problemática debemos plantearle desde el Estado determinados mecanismos de inclusión».
En el mismo sentido, Iribarren insistió en que la propuesta del Vicegobernador «me parece muy buena porque por otro lado la idea de volver al Servicio Militar Obligatorio es algo absolutamente retrógrado, nostálgico y fuera de toda discusión sensata, porque una instrucción militar no se condice ni con un camino de inclusión ni con un camino de educación».
En la misma línea, afirmó que «creo que necesariamente hay que empezar a tomar las cosas en serio y desde las distintas gestiones municipales, provinciales o nacionales, empezar a abordar con más fuerza la creación de mecanismos que cada vez le den más cabida a los distintos actores de la sociedad».
Además, explicó que la necesidad de incluir a la juventud “viene muy emparentada con la problemática de la seguridad y la marginalidad, porque la gente pide soluciones a sus propios problemas individuales pero la visión del gobernante tiene que estar por encima de esto, porque si bien debemos actuar en el sentido de las necesidades del pueblo, también tienen que ser soluciones que nos incluyan a todos».
Por último, el jefe comunal se refirió a las propuestas que impulsa el presidente del Senado para beneficiar a los pequeños productores del interior de la provincia de Buenos Aires, a través de un convenio para facilitar el acceso al combustible y los fertilizantes, y así aumentar la producción de los sectores más pequeños de la cadena productiva de granos.
«Lo importante es determinar quiénes son los pequeños productores, porque en un distrito como el mío un pequeño es un tipo con 200 hectáreas y comparado con un ciudadano común, es alguien con mucho poder adquisitivo, por eso me parece que debe haber un debate claro sobre a quien se va a beneficiar», concluyó Iribarren.