El vicepresidente Amado Boudou ratificó «el compromiso de la Argentina con el uso pacífico de la tecnología nuclear, la no proliferación y la seguridad», en la III Cumbre de Seguridad Nuclear en La Haya, Holanda.
«La Argentina reivindica el derecho inalienable al desarrollo de la tecnología nuclear con fines pacíficos», dijo Boudou en esa reunión de jefes de estado y de gobierno, informó hoy un comunicado de prensa del Senado.
El vicepresidente sostuvo además que «los distintos esfuerzos contra el terrorismo, que apoyamos y de los cuales participamos activamente, no deben ser vías indirectas para limitar el derecho soberano de los países a la autonomía tecnológica».
En su exposición, Boudou aseguró que «la Argentina está comprometida con los más altos estándares en materia de seguridad física y tecnológica», y detalló las políticas impulsadas desde 2003 por el gobierno nacional en esa materia.
Como ejemplo, puntualizó que «los reactores de investigación fueron convertidos para que funcionen con uranio de bajo enriquecimiento», en consonancia con las recomendaciones de la Conferencia Internacional para la reducción de la Amenaza Global.
«También hemos proyectado nuestro compromiso con políticas innovadoras, seguras y confiables en el diseño y construcción de nuestra central de potencia CAREM, que nos coloca a la vanguardia del desarrollo de reactores modulares pequeños», añadió.
En el mismo orden, recordó que la Argentina suscribió diversos acuerdos, entre ellos los tratados de no proliferación y para la proscripción de armas nucleares de América Latina y el Caribe.
Además, destacó la importancia regional de la agencia argentino-brasileña para la contabilidad y control de materiales nucleares.
«La Argentina endosa totalmente el comunicado de La Haya», ya que «representa el resultado del esfuerzo conjunto y cooperativo de todos los países por lograr consensos políticos», dijo también Boudou».