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Luis Arias, juez en lo Contencioso Administrativo, dialogó con esta agencia sobre el proyecto de reforma de ley del Código Penal, propuesto por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y afirmó: “Actualmente tenemos nuevas realidades, nuevas situaciones que regular. Las leyes no son estáticas, sino que necesitan adaptarse a los tiempos. El Código Penal argentino necesita una reforma, porque las topologías penales deben ser modificadas para ser consecuentes con la realidad”.
Por otro lado, sostuvo que se ha propagado “un falso concepto” a partir del anuncio de la reforma, relacionado con “un exacerbado interés punitivo que existe hoy en la sociedad, que da lugar al reclamo de políticas represivas, a infligir castigos excesivos para quienes cometen delitos”.
Al respecto, desarrolló: “Nuestro primer impulso siempre es castigar: es la primer herramienta a la que acudimos cuando creemos que una conducta no se ajusta a la legalidad o a las reglas del juego en nuestra subjetividad. Es una forma de someter al sujeto a nuestra perspectiva, a nuestra forma de pensar lo legal. Como sociedad, tenemos que salirnos de ese reflejo condicionado cuando aparecen situaciones delictivas, porque es una trampa que tiene que ver con el miedo. Frente a algo que sentimos amenazante, acudimos al castigo excesivo sin siquiera entender lo que pasa”.
En torno a la postura de Sergio Massa, diputado nacional por el Frente Renovador y férreo opositor al anteproyecto, el juez explicó que la reforma es una cuestión técnica: asigna una tipología y una pena por cada delito. “Esa modificación no deriva en liberar a todos los presos, como él dijo. Es un manejo absurdo de esta situación. Hay una utilización del miedo”, señaló.
Asimismo, agregó: “Tengo la sensación personal de que, frente a un contundente discurso de la Presidenta de la Nación, Massa tenía que encontrar algún atajo para justificar su existencia en el ámbito político y encontró la reforma del Código Penal como una excusa para explotar cierto humor social, cierto miedo que existe en la sociedad respecto a la inseguridad, que objetivamente no es otra cosa que miedo. El diputado está especulando con la crítica al anteproyecto para obtener un rédito político, lo está utilizando”.